Publicado el 13 julio, 2018
Simón Trujillo Finalizaba el año 1944 cuando mi mamá, quien vivía en una casa humilde ubicada entre los puentes de San Ramón y Crucecita en la denominada Quebrada del Aguacatico, tomó mi mano y comenzó a caminar hasta llegar a una empinada escalera de concreto, la cual conducía a la parroquia San José. Se dirigió entonces a una hermosa casa, situada entre las esquinas Santa Inés y San Enrique, donde […]