Publicado el 28 octubre, 2016
Coincidiendo con los intentos por borrar la historia promovidos en la Unesco, la Autoridad de Antigüedades de Israel divulgó el mismo miércoles el hallazgo de un papiro de hace 2700 años, que ahora constituye la fuente no bíblica más antigua que incluye la palabra “Jerusalén” escrita en hebreo.