El libro VaYikrá que comenzamos a leer esta semana, se conoce como el “Tratado del servicio de los cohanim” (Torat cohanim), y en él se desglosan y detallan todas y cada una de las ofrendas que debían realizarse en el mishkán.
“Y congregó Moshé a toda la comunidad de los hijos de Israel, y les dijo a ellos los mandatos que ordenó Dios para hacer” (35, 1). Aquí empieza, de facto, la construcción del mikdash.
Parte de las condiciones que estableció Dios para entregar la Torá y revelarse en su mundo fue la de prohibir a Israel subir al Monte Sinaí, aproximarse a él, e inclusive tocarlo.