Desde estas páginas quiero rendirle un muy sentido homenaje a mi querido esposo, Leo Rittigstein Mehler (Z’L), quien falleciera hace poco menos de un mes.
Llega Pésaj y con él la celebración de nuestra libertad e identidad como pueblo escogido por Dios para cumplir con sus mandamientos, y ser ejemplo entre las naciones del mundo.