El primer ministro de India, Narendra Modi, estuvo en Israel durante tres días en una visita que ha sido calificada como “altamente exitosa” y que estuvo plena de ceremonias, firmas de tratados y reuniones oficiales.
Este jueves 6 de julio se efectuó en Jerusalén el acto inaugural de la vigésima Macabiada Mundial, el mayor evento deportivo judío y tercero más grande del mundo, tras los Juegos Olímpicos y los Mundiales de Fútbol.
Simone Veil, fallecida el 30 de junio a los 89 años, llegó a ser la persona más respetada de Francia.
Hay quienes consideran que la posesión de bienes materiales es tan indispensable para su felicidad que luchan incansablemente solo con el objetivo de alcanzarlos. Pero una vez logrados ¿se sentirán plenos?
“Demographics, existential threat”, ha calificado el crecimiento demográfico palestino de “amenaza existencial”.
Mucho se ha escrito estos días sobre la triste noticia de la desaparición de la gran líder humanista Simone Veil, quien deja una enorme estela que marcó el compromiso de un futuro de paz y cooperación en el mundo.
Un vacío. Esa es la sensación que ha provocado la desaparición de Marianne Kohn Beker, figura indispensable en el quehacer cultural y político de nuestra comunidad, e intelectual descollante en el ámbito académico nacional.
Marianne era una mujer plena de ideas, culta, muy leída. Conocía muy bien los autores judíos contemporáneos, y tenía una clara posición del valor de la diáspora judía, de sus logros, de su idiosincrasia y de cómo debía relacionarse con Israel.
El anuncio de la muerte de Marianne me causó profundo dolor y me hizo recordar aquello que alguien dijo: “Es como morir dos veces cuando muere un hombre bueno” (en este caso una mujer buena).