E l 8 de marzo, con la asistencia de más de 1300 invitados en un ambiente festivo, se llevó a cabo la ceremonia de Bat Mitzvá Colectiva en la Sinagoga de la Unión Israelita de Caracas.

“Queridas Bnot Mitzvá, hoy brilla el sol porque ustedes brillan en esta maravillosa mañana, rodeadas de padres, abuelos y amigos que han venido a unirse en este día tan importante de sus vidas, donde ustedes son las protagonistas de esta simjá”. Estas hermosas palabras pronunciadas por Anali Toledano, coordinadora general de la Bat Mitzvá, resaltan el significado de esta tradición.

MaTovú Ohaleja Yaacov, “Cuán hermosas son tus tiendas, Yaacov; tus moradas, Israel” (Números XXIV: 5). Con este tradicional rezo, y acompañadas por la melodiosa voz de Pedro Stern, quien hizo vibrar el recinto, entraron las Bnot Mitzvá a la concurrida sinagoga.

Quisiéramos hacer mención de dos momentos muy emotivos. El primero, cuando las Bnot Mitzvá giraron hacia el Arón Hakodesh para entonar plegarias, rogaron por la bendición de sus padres y por la paz en el mundo; el segundo, cuando los padres, poniéndose de pie, bendijeron junto al rabino Eitan Weisman a sus hijas: “Haga Dios que seas como Sara, Rivka, Rajel y Lea. Que Dios te bendiga y te proteja. Que el Eterno haga resplandecer su rostro sobre ti y te otorgue gracia. Que el Eterno incline su rostro hacia ti y te conceda la paz”.

El rabino Eitan Weisman se dirigió a las jóvenes con un mensaje en el que destacó la importancia de la continuidad de nuestras tradiciones y velar por el bienestar de nuestra comunidad. Los invitados plenaron el Gran Salón de la UIC para felicitar a las Bnot Mitzvá y celebrar, en un ambiente de confraternidad y alegría, esta fiesta comunitaria.

El éxito del evento no sería posible sin el apoyo de los voluntarios y profesionales que volcaron en las jóvenes su capacidad, fervor y espiritualidad. Vaya para ellos todo el reconocimiento de la Federación WIZO de Venezuela: Unión Israelita de Caracas; Sistema Educativo Comunitario; morá Maly Faidengold, ejemplo de perseverancia y ejemplar educadora; Fortuna Behar, destacado valor de la Bat Mitzvá; Jacqueline Cababie, ejemplo de responsabilidad y entrega; rabino Eliyahu Bittan, inspiración de nuestras tradiciones; Raquel Margulis, Lily Salama, Mario Nassí, Ruthy Scher, Francis Rubinstein de Stern, Batsheva Meilichson, Daniel Pacheco, Eduerdo Pilo, Neshei Chabad, rabanit Chani Rosenblum, rabanit Goldy Slavin, rabanit Milka Raitport, Dayanara González, Carmelo Marrero y Olinto Martínez.

“Dos cosas heredé: raíces y alas”

Previamente a este evento principal, el domingo 29 de febrero se llevó a cabo, en un ambiente íntimo y familiar, la tradicional reunión de las Bnot Mitzvá con padres y abuelos, donde se compartieron las experiencias vividas durante cinco meses.

La actividad dio comienzo con un emotivo mensaje de Ruth Wahnón, presidenta de WIZO AVIV: “Hace 44 años WIZO empezó a poner en marcha un sueño: organizar una Bat Mitzvá Colectiva y reunir a las niñas de nuestra comunidad para que juntas, en armonía y de manera sencilla, celebraran su Bat Mitzvá. 44 años después y a través de tres generaciones, 2769 de nuestras hijas han recibido una formación integral en cuanto a lo que significa ser una mujer judía en el amplio sentido de la palabra”.

Las Bnot Mitzvá recibieron un diploma, las manualidades hechas en las diferentes actividades, copas y candelabros, y el tradicional anuario en el cual está todo el material de cánticos y plegarias, la lista de las 2769 Bnot Mitzvá, en la que muchas de ellas encontrarán a sus madres, fotos de las diferentes actividades y lista de los cumpleaños de las compañeras, para que el contacto entre las jóvenes nunca se pierda.Todos recuerdos importantes que esperamos se mantengan a lo largo del tiempo.

Seguidamente Judith Gemer, integrante de la junta directiva de Keren Ezra, recibió un donativo producto de lo que recogieron nuestras Bnot Mitzvá, más el tradicional donativo de WIZO. La rabanit Hadara Weisman dedicó unas palabras llenas de contenido, en las que resaltó el papel fundamental que han desempeñado las mujeres en nuestra tradición. A continuacion las mamás y abuelas se acercaron a sus hijas y nietas y, guiadas por Weisman, bendijeron a sus Bnot Mitzvá