Este sencillo plato principal tiene muchas cosas buenas. Está repleto de frutas secas dulces, nueces crujientes y especias aromáticas
Fabienne Viner Luzzato
• Caliente el horno a 200°C
• Corte las cebollas y el ajo en rodajas.
• Coloque el pollo en una bandeja para asar.
• Mezcle las especias, cebollas, ajo, mermelada y media a una cucharada de sal y pimienta.
• Frote esta mezcla sobre todos los trozos de pollo. Agregue el agua a la fuente para asar. El pollo creará su propia salsa con su propia grasa, no es necesario agregar aceite.
• Cocine los trozos de pollo con la piel hacia abajo durante 40 minutos.
• Retírelos del horno, déles la vuelta, agregue las nueces y las frutas (dando vuelta a la mezcla para que se cubran con los jugos y se combinen bien con la mezcla de carne), y cocine durante otros 40 minutos. Es posible que estén listos un poco antes, así que verifique si están listos perforando uno de los trozos más gruesos y viendo si los jugos salen claros después de aproximadamente una hora de cocción. Los trozos de pechuga se cocinarán más rápido que la carne oscura.
• Sirva adornado con perejil o tomillo.
Fuente y foto: The Jewish Chronicle (thejc.com).
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.