El judoka israelí Sagi Muki se llevó la medalla de oro en la final del Campeonato Mundial de Judo en Tokio, Japón, el 27 de agosto, convirtiéndose en el primer atleta israelí en recibir el primer lugar en esta disciplina. Muki obtuvo el oro al derrotar a Matthias Casse de Bélgica, en la final de la categoría masculina de menos de 81 kilogramos.
Un emocionado Muki cayó al suelo después de ganar, luego se levantó y extendió los brazos para aplaudir a la audiencia.
El campeón de peso mediano llegó a la final después de derrotar por poco al egipcio Mohamed Abdelaal, quien se negó a estrecharle la mano al final del partido.
Antes de la semifinal se informó que Saeid Mollaei de Irán, quien también había avanzado a la penúltima etapa, podría retirarse si tuviese que enfrentar a Muki, aunque supuestamente Irán puso fin a su larga prohibición de que sus atletas compitieran con israelíes. Sin embargo, el asunto no se pudo poner a prueba, ya que Mollaei finalmente perdió ante Casse, mientras que Muki luchó contra Abdelaal.
Durante la ceremonia de entrega de medallas se interpretó el himno nacional de Israel, Hatikva, mientras Muki y los israelíes de la audiencia lo cantaban.
La victoria de Muki lo convierte en el primer israelí que logra el campeonato mundial. En 2013, Yarden Jarbi había ganado el Campeonato Mundial de Judo en Río de Janeiro, en la categoría femenina de menos de 63 kilogramos.
Muki es una estrella en ascenso en el deporte israelí. Dos veces campeón de Europa, era considerado favorito para una medalla en los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro, pero una lesión frustró sus posibilidades. En mayo se llevó a casa la medalla de oro en el Grand Slam de Bakú, mientras en octubre pasado ganó el oro en el Grand Slam de Abu Dhabi, lo que motivó que el himno nacional de Israel se tocara en un estado árabe del Golfo por primera vez.
Sagi Muki es una de las mayores esperanzas de Israel para los Juegos Olímpicos de Verano 2020, que también se celebrarán en Tokio.