La mujer virtuosa es honrada este año en el festival de danzas israelíes.
E l Festival de Danzas Israelíes de Hebraica, Kineret, inmerso en el Proyecto Mekorot, destaca valores en acción con el auspicio de la Fundación Keren Pincus, representando para la comunidad el orgullo de pertenecer a un pueblo que se expresa de diferentes maneras, una de las cuales es su folklore.
Este año, basados en los valores culturales, el tema central de trabajo en Hebraica ha sido el quinto mandamiento de la Torá: “Honra a tu padre y a tu madre, para que sean prolongados en la tierra los días que el señor tu Dios te da”. Siendo la mujer parte fundamental y fuente de inspiración, centro de la familia, pilar del Judaísmo y eslabón imprescindible de la continuidad como pueblo, Kineret 2016 honrará a la mujer judía, a la mujer virtuosa: Eshet Jail.
La mujer judía es responsable de la educación, formación de los hijos y conservación de las tradiciones, razón por la cual todas las connotaciones de una mujer virtuosa estarán representadas metafóricamente en las coreografías, en las canciones y en las composiciones audiovisuales de este espectáculo.
En 1982 se llevó a cabo el primer Festival Kineret. 35 años después, Hebraica sigue innovando y mostrando la importancia de ser parte de una historia inquebrantable que se continúa construyendo día a día.
El principal objetivo de Kineret Eshet Jail es la reflexión acerca del papel que juega la mujer en la vida diaria. A través del color, la música y el movimiento, el público podrá ver los valores en acción.
Anabella Jaroslavsky, directora ejecutiva de Hebraica, indica que Kineret representa un reto creativo: “Es el momento de agradecer a todos los miembros de esta institución por su apoyo incondicional que nos permite, año a año, seguir soñando y brindándole a nuestros niños, jóvenes y adultos un escenario para sentirse especiales y expresar su Judaísmo con todo su cuerpo”.
Jaroslavsky explica que los bailes israelíes son una manera de expresión completa: “Cuando se baila en un círculo todos somos iguales. Lo hacemos descalzos para estar en contacto con la tierra de Israel, en cualquier lugar del mundo podemos encontrar a una persona que sabe el mismo rikud (baile) que nosotros, y ya somos hermanos en esa ronda interminable”.
Para Karina Beraha, directora del Departamento de Bailes Israelíes, el baile es la manera más básica de relacionarse con el pueblo judío, con sus diferentes etnias y nacionalidades. En tiempos fáciles o difíciles, el pueblo judío siempre siguió bailando.
Inicios de Kineret
Kineret inició como muestra del trabajo de un Departamento de Bailes que se creó en el año 1982, primer festival. El grupo Meretz, la primera leaká representativa, fue la semilla de todo este movimiento.
Anabella Jaroslavsky cuenta que las piezas musicales venían de Israel en casetes y se grababan en un estudio donde trasferían a una cinta y se cortaban físicamente para adaptarlas a los bailes que se hacían. Hoy en día toda la parte técnica es mucho más simple. Sin embargo, cada año el público es más exigente.
Durante mucho tiempo hubo integrantes masculinos, no obstante no ha sido posible continuarlo. Aproximadamente desde hace 15 años el festival escoge un tema enriqueciendo el contenido, ofreciendo algo más que solo una muestra de trabajo sobre un escenario decorado.
¡Kineret es orgullo comunitario con la participación de todos!
Daphne Breuer de Jagerman.
Gerencia de Comunicaciones e Información del CSCD Hebraica.