Un destacado virólogo israelí insta a los líderes mundiales a calmar a sus ciudadanos sobre la pandemia de coronavirus, diciendo que las personas están siendo sometidas a un pánico innecesario.
Jihad Bishara, director de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Beilinson de Petaj Tikva, dice que algunos de los pasos dados en Israel y en el extranjero son muy importantes, pero que el virus no se trasmite por el aire, la mayoría de las personas infectadas se recuperan sin siquiera saber que estuvieron enfermas, ya se conocen los grupos en riesgo, y el pánico global es innecesario y exagerado.
Jihad Bishara, director de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Beilinson de Petaj Tikva.
«He estado en esta profesión durante 30 años», dijo Bishara durante una entrevista en el Canal 12. «He pasado por MERS, SARS, ébola, la primera Guerra del Golfo y la segunda, y no recuerdo nada como esto. Hay un pánico exagerado e innecesario. Tenemos que calmar a la gente”.
«Las personas piensan que hay un virus que está en el aire, que nos va a atacar a todos, y que quien resulte infectado va a morir», continuó. «No es así en absoluto. No está en el aire. No todos [los infectados] mueren; la mayoría de ellos mejorarán y ni siquiera sabrán que estuvieron enfermos o tendrán un poco de mucosidad».
Pero en Israel y el resto del mundo, “todos están empujando a los demás al pánico; los líderes a través de los medios de comunicación, y el público en general luego estresa a los líderes. Hemos entrado en un círculo vicioso».
Bishara insta al público a internalizar que «estamos hablando de un virus que no está en el aire. La infección se trasmite a través de gotitas. Solo si usted está cerca de alguien que tiene el virus y le cae su saliva cuando estornuda o tose, puede enfermarse. Y si no, mantenga la higiene personal «, principalmente lavándose las manos. Agrega que el virus no parece ser «demasiado inteligente», a diferencia de la gripe, «que es muy inteligente, cambia, se adapta e infecta a las personas a través de sus vías respiratorias».
En Israel y el resto del mundo “todos están empujando a los demás al pánico; los líderes a través de los medios de comunicación, y el público en general luego estresa a los líderes. Hemos entrado en un círculo vicioso»
Bishara señala que algunos de los duros pasos tomados en Israel, que cerró sus fronteras, limita las reuniones a no más de 10 personas, cerró todas las instalaciones educativas, centros comerciales, restaurantes y lugares de entretenimiento y cultura, han sido motivados por los líderes, conscientes de que el sistema de salud israelí podría colapsar ante cualquier presión adicional.
La cuarentena domiciliaria ha sido ordenada para «todos los que han pasado cerca de alguien que podría haber sido infectado por otra persona», reclama, «porque saben que nuestro sistema de salud no puede sufrir más tensiones».
Refiriéndose al bloqueo nacional aplicado en Italia, opina que «la cuarentena es una precaución efectiva, pero tiene que usarse en forma moderado. Puedes cerrar todo un país, pero hay otros medios».
En esta etapa, dijo, “sabemos cómo se comporta el virus, cómo se propaga y qué grupos están en peligro. Ahora sabemos que el virus es principalmente peligroso para las personas mayores, las que tienen antecedentes de enfermedades crónicas y para aquellas que están inmuno-comprometidas».
Apelando a los líderes de Israel “que aparecen todas las noches a las 8 para anunciar todo tipo de medidas, algunas muy importantes”, finalizó, deberían “ante todo calmar a la gente «.
Fuente: The Times of Israel. Traducción NMI.