Período 2024-2026
La nueva Junta Directiva, acompañada por dirigentes y representantes de otras instituciones comunitarias
En un acto pleno de significado, el pasado 26 de mayo la Unión Israelita de Caracas llevó a cabo el acto de instalación de su nueva Junta Directiva para el período 2024-2026 en el salón Isaac y Rosa Baltuch.
El encuentro, al que asistieron directivos y profesionales de todas las instituciones comunitarias, así como numerosos miembros de la kehilá, se inició con un minuto de silencio por las víctimas del ataque terrorista ocurrido en Israel el pasado 7 de octubre, así como los numerosos soldados de Tzáhal que han perdido la vida en la guerra contra Hamás en Gaza.
El maestro de ceremonias, Alexander Fincheltub, dio inicio al acto invitando al podio a Carlos Sacks, presidente de la comisión electoral, quien describió el éxito del proceso de los comicios, en el que la participación fue similar al de las elecciones pasadas, y que otorga plena representatividad a la nueva Junta. Destacó que el nuevo Comité Ejecutivo incluye por primera vez a una mujer, la primera vicepresidenta Francis Krivoy.
Enrique Sultán, presidente del Vaad Hakehilot y de la Asociación Israelita de Venezuela, expresó sus deseos de éxito a la nueva Junta Directiva, y destacó que en el período que culmina se logró trabajar en conjunto entre la UIC y la AIV por el bien de una comunidad que, si bien está disminuida en número, sigue estando activa y exigiendo servicios. Felicitó a los equipos saliente y entrante y les reiteró su amistad personal.
Daniela Kuperstein, hija de Eduardo, manifestó su alegría por los logros alcanzados por su padre, y por el hecho de que ahora podrá compartir más tiempo con su familia.
Tocó el turno al presidente saliente de la UIC, Eduardo Kuperstein, quien enumeró algunos de los logros de la Junta saliente:
“En el plano económico, hemos implementado medidas para fortalecer la UIC y sus instituciones hijas: el colegio, Hebraica y Beit Avot, asegurando su sostenibilidad a largo plazo. A pesar de las dificultades financieras que atraviesa el país, hemos logrado mantener nuestras operaciones y servicios, gracias a una gestión responsable que nos ha permitido reducir los gastos operativos y minimizar el déficit de las instituciones.
“Se ha invertido en infraestructura y tecnología, mejorando los procesos de almacenamientos físicos y virtuales. Hemos culminado con éxito la primera etapa del proyecto de digitalización de la UIC a través de su nuevo portal web, el cual se encuentra a la disposición de todos y donde podrán gestionar los pagos de membresías, hacer pedidos de productos kosher con delivery , visitar de manera virtual el cementerio Gan Menujá y la lápida deseada, obtener información de las festividades religiosas y sus horarios.
“En el ámbito social, hemos trabajado junto a nuestras directivas de bienestar comunitario para fortalecer el sistema de ayudas, logrando una alianza vital con HIAS que nos ha guiado en un proceso de profunda trasformación, permitiendo crear diversos protocolos y profesionalizar los procesos, obteniendo un diagnóstico mucho más preciso de las necesidades, optimizando los recursos comunitarios.
“Después de una ardua, larga y muy desgastante gestión del Comité Ejecutivo de la UIC, la Comisión de Conciliación y Arbitraje, la Comisión asesora legal, con la ayuda del presidente de la B’nai B’rith internacional y su junta directiva, así como el presidente del Distrito 23, se logró apoyar la reinstitucionalización de la B’nai B’rith con una nueva junta y, lo más importante, traer el tan anhelado Shalom a nuestra comunidad”.
Tras agradecer a todo el equipo que lo acompañó, a los profesionales de la UIC y a su familia, concluyó:
“Me queda la satisfacción de haber dado lo mejor de mí en pro de la comunidad, de dejarla encaminada hacia la tan necesaria restructuración. Saber que contamos con una nueva junta directiva de lujo, que la transición a la dirigencia joven empezó, y que tenemos un nuevo presidente dispuesto a dar el todo por su comunidad”.
Como es tradición en estos actos de transición, se ofreció un reconocimiento a miembros de la kehilá que han destacado por su dedicación y trabajo en beneficio a la comunidad, designándolos como miembros honorarios de la institución.
El primero fue Jacobo Rozenbaum Z’L, quien se desempeñara como tesorero hasta poco antes de su fallecimiento en noviembre de 2023. La placa la recibieron su esposa Jeanette y su hermano Sami, quien luego compartió con el público un mensaje de audio enviado por el hijo mayor de Jacobo, Abraham Rozenbaum.
El otro miembro homenajeado fue Harry Gemer, a quien se reconoció su incansable labor, dedicación y compromiso como director de la Comisión de Asuntos Religiosos y Jevra Kadisha, quien se dirigió al público para agradecer el honor recibido.
El nuevo presidente de la UIC, Roberto Mishkin, se dirigió al público:
“Estar en este cargo, mucho más que un simple acto de liderazgo; representa la oportunidad de continuar el legado de mis padres y abuelos, quienes, de diferentes formas, dedicaron una gran parte de sus vidas al servicio de Israel y de nuestra comunidad. De ellos aprendí la importancia de servir a los demás, de trabajar en equipo de forma desinteresada y con un compromiso inquebrantable, siguiendo los principios judeo-sionistas que nos identifican.
“Es esencial que fomentemos la unidad, la inclusión y el respeto mutuo entre todos nosotros. Creo firmemente en la importancia de escuchar las voces de todos los miembros, y trabajar en colaboración para abordar los desafíos que enfrentamos y aprovechar las oportunidades que se nos presentan, sin importar niveles de observancia, educación o nivel económico; la creación de espacios compartidos donde quepamos todos, es más que importante, es fundamental.
“Nuestro reto como directivos y como comunidad lo representa la necesidad de restructuración y redefinición de nuestras estructuras comunitarias. Los cambios son inevitables e inminentes. Las condiciones demográficas y económicas de nuestra kehilá han mermado dramáticamente. Hacemos vida en instituciones diseñadas para una población significativamente más grande de la actual. Nos toca a todos ser partícipes de estas difíciles decisiones que habrá que tomar en un futuro cercano, para garantizar la permanencia de nuestra comunidad para las generaciones por venir”.
Para cerrar el acto, el rabino Eitan Weisman extendió sus bendiciones a la nueva Junta Directiva y a toda la kehilá.
Redacción NMI.
Fotos: José Esparragoza
Roberto Mishkin nació en Caracas el 1º de diciembre de 1971. Es hijo de Noel y Myriam Mishkin, ambos muy activos en la comunidad judía de Caracas.
Cursó la Primaria y Secundaria en el Colegio Hebraica Moral y Luces, de donde egresó en 1988. Fue integrante de la selección de Natación de Hebraica y participó en múltiples torneos regionales, estadales y nacionales, así como en los Juegos Macabeos Panamericanos que se realizaron en Venezuela en 1987. También participó en el Movimiento Universitario de Hebraica.
Estudió Ingeniería Química en la Universidad Metropolitana, y tiene una maestría en Ingeniería en Sistemas de Manufactura por la Universidad de Lehigh en Pensilvania. Ha trabajado en las empresas de su grupo familiar desde su regreso a Venezuela.
Su labor comunitaria comenzó con una breve pasantía en el Departamento de Finanzas de Hebraica, y se consolidó en la Unión Israelita de Caracas en 2016 como cooptado en la Comisión de Administración y Finanzas durante la presidencia de Martín Goldberg.
Con el pasar de los años fue asumiendo cargos de mayor responsabilidad, incluyendo, subdirector de Administración, secretario general del Comité Ejecutivo y primer vicepresidente del Comité Ejecutivo, así como vocal, subsecretario y secretario del Vaad Hakehilot.