Primer ministro Bennett realiza consulta de seguridad tras el tercer ataque terrorista mortal en 8 días.
Emanuel Fabián*
Cinco personas fueron asesinadas por un terrorista palestino que abrió fuego contra los transeúntes en la localidad de Bnei Brak el martes por la noche, marcando el tercer ataque terrorista mortal en Israel en ocho días.
El pistolero fue abatido por dos policías luego de del ataque, poco antes de las 8 de la noche. El hombre abrió fuego contra personas que caminaban, andaban en bicicleta o conducían sus automóviles. Uno de los dos oficiales resultó herido en el incidente, y luego murió a causa de sus heridas en el hospital.
El ataque, tercer incidente terrorista mortal en una semana, aumentó las preocupaciones por la creciente ola de violencia antes del mes sagrado musulmán del Ramadán. “Israel se enfrenta a una ola de terrorismo árabe asesino”, dijo el primer ministro Naftali Bennett en un mensaje a la nación. “Las fuerzas de seguridad están trabajando. Lucharemos contra el terrorismo con persistencia, diligencia y puño de hierro”.
Cuatro de las víctimas fueron declaradas muertas en el lugar; el oficial de policía Amir Khoury, de 32 años, falleció después de ser trasladado al Centro Médico Beilinson, informaron las autoridades.
Dos de las víctimas fueron el residente de Bnei Brak, Yaakov Shalem, padre de cinco hijos, así como Avishai Yehezkel, de 29 años. A Yehezkel le sobreviven su esposa y un hijo de dos años. Las otras dos víctimas eran trabajadores extranjeros que no fueron identificados de inmediato.
Imagen del terrorista tomada por una cámara de seguridad
(Foto: captura de pantalla)
Los funcionarios de seguridad identificaron al terrorista como Diaa Hamarsheh, de 26 años, palestino de la ciudad de Yabad, cerca de Yenín, en Judea y Samaria, que estaba ilegalmente en Israel. Reportes de la televisión señalaron que hubo celebraciones fuera de la casa de su familia al conocerse el atentado.
Según la policía, Hamarsheh llegó a la ciudad en un vehículo, salió y comenzó a disparar con un rifle grande. Mató a tres personas en el primer lugar, antes de correr varios cientos de metros y matar a dos más, incluido el oficial de policía.
Un video de la primera escena lo mostraba con un rifle parado en el área de estacionamiento de un edificio residencial, disparando hacia la calle mientras un joven con atuendo ultraortodoxo escapaba. Momentos después el tirador apunta a una persona que pasa en bicicleta, pero no le dispara. Luego camina tranquilamente hacia la calle, grita en hebreo a un automóvil que se aproxima que se detenga antes de disparar al conductor, aparentemente Shalem, quien chocó su vehículo contra el edificio.
Otro video lo mostró persiguiendo a una persona en bicicleta cerca de una calle concurrida, e intentando sin éxito dispararle antes de correr hacia una tienda. Luego pasó a la segunda ubicación.
No quedó claro de inmediato cómo Hamarsheh ingresó a Israel. Anteriormente había cumplido condena en una prisión israelí por pertenecer a un grupo terrorista y por tráfico de armas.
El primer ministro Bennett se reunió en una consulta de seguridad con altos funcionarios de defensa después del ataque.
El acto terrorista se produjo en un momento en que las fuerzas de seguridad ya estaban en alerta máxima, después de dos ataques cometidos por terroristas inspirados en el Estado Islámico que dejaran seis muertos la semana pasada.
El domingo, dos policías murieron en un ataque a tiros en Hadera. Los pistoleros eran árabes israelíes aparentemente afiliados al grupo yijadista. Cinco días antes, cuatro personas murieron en un ataque terrorista en la ciudad sureña de Beersheva. El terrorista, previamente condenado por intentar unirse a ISIS, fue abatido a tiros por transeúntes. También era ciudadano israelí.
La policía había reforzado las fuerzas en áreas donde se percibía una amenaza de violencia, luego del ataque en Hadera. Las Fuerzas de Defensa de Israel también han reforzado sus tropas en Cisjordania.
Las autoridades israelíes arrestaron a 12 personas con presuntos vínculos con el Estado Islámico durante la noche del lunes al martes. Se esperan más arrestos después del ataque del martes.
Las tensiones han aumentado entre Israel y los palestinos en las últimas semanas en Cisjordania y Jerusalén Oriental. Diez palestinos murieron en enfrentamientos violentos con tropas israelíes, algunos en tiroteos en Cisjordania, y otros al intentar realizar ataques terroristas.
El fin de semana pasado, dos oficiales resultaron heridos en un presunto ataque con arma blanca en el barrio Ras al-Amud de Jerusalén Este, y un hombre israelí fue apuñalado y levemente herido mientras trotaba por la calle Hebrón de Jerusalén. A principios de este mes hubo varios ataques en la Ciudad Vieja de Jerusalén y en una ciudad cercana de Cisjordania.
Funcionarios israelíes han expresado el temor de que la violencia pueda intensificarse durante el mes del Ramadán, que comienza a principios de abril.
*Corresponsal militar de The Times of Israel.
Fuente: The Times of Israel.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.
