Tel Aviv es la ciudad más cara del mundo para vivir, y la vertiginosa inflación ha elevado los costos de vida en todo el mundo, según una encuesta publicada este miércoles 1º de diciembre.
La ciudad israelí escaló cinco peldaños para obtener el primer lugar por primera vez en la clasificación compilada por Unidad de Inteligencia Económica, la división de investigación y análisis de la venerable revista The Economist.
El índice de costo de vida mundial se compila comparando los precios en dólares estadounidenses de bienes y servicios en 173 ciudades. Tel Aviv subió en la clasificación en parte debido a la fortaleza del shékel frente al dólar, así como por los aumentos en los precios del transporte y los comestibles.
París y Singapur ocuparon el segundo lugar, seguidos por Zúrich y Hong Kong. Nueva York ocupó el sexto lugar y Ginebra el séptimo. Completando el “top 10” siguen Copenhague, Los Ángeles y Osaka, Japón. El año pasado, el estudio colocó a París, Zúrich y Hong Kong juntos en primer lugar.
Tel Aviv: vibrante y costosa
Los datos de este año se recopilaron en agosto y septiembre, a medida que aumentaban los costos de flete y productos básicos, y muestran que, en promedio, los precios subieron un 3,5% en términos de moneda local, la tasa de inflación más rápida registrada en los últimos cinco años.
Las restricciones sociales debido a la pandemia de coronavirus «han interrumpido el suministro de bienes, lo que ha provocado escasez y precios más altos», explica Upasana Dutt, jefe de costo de vida mundial de la Unidad de Inteligencia de The Economist. «Podemos ver claramente el impacto en el índice de este año, con el aumento de los precios de la gasolina particularmente marcado», dice. Se espera que los bancos centrales aumenten las tasas de interés con cautela, para reducir la inflación.
El dato de inflación promedio no incluye cuatro ciudades con tasas excepcionalmente altas: Caracas, Damasco, Buenos Aires y Teherán. La capital iraní subió del lugar 79 al 29 en el ranking, ya que las sanciones estadounidenses han elevado los precios y provocado escasez.
Damasco, Siria, fue clasificada como la ciudad más barata del mundo para vivir.
Fuente y foto: The Times of Israel.
Traducción NMI.