El planeta entero vive circunstancias sin precedentes: la pandemia mantiene encerrada en sus casas a una tercera parte de la humanidad. En este momento resulta necesario consultar la opinión de un profesional de la salud mental, por lo que Nuevo Mundo Israelita realizó la siguiente entrevista exclusiva (obviamente por medios digitales) a Francis Krivoy, reconocida sicóloga de nuestra kehilá, quien analiza y ofrece recomendaciones para sobrellevar lo mejor posible el confinamiento social
Sami Rozenbaum
NMI. Las actuales generaciones no habían experimentado una situación como la actual, de aislamiento social prolongado. ¿Qué efectos puede esto tener en los niños, jóvenes, adultos y adultos mayores?
Francis Krivoy. La situación actual representa un reto para todos, indistintamente de la edad. Implica el cambio drástico de rutinas, cancelación de planes y puede cursar con manifestaciones sicológicas si no se maneja de manera apropiada, aun sabiendo que las medidas de aislamiento son necesarias para impedir la propagación del virus.
Entre las manifestaciones sicológicas más frecuentes están: ansiedad, indefensión, impotencia, irritabilidad, frustración, aburrimiento, alteraciones del sueño, pensamientos negativos, manifestaciones depresivas, y en menor medida podría presentarse el trastorno de estrés postraumático. Si se trata de personas con trastornos sicológicos previos, las manifestaciones se podrían exacerbar en condiciones de aislamiento.
En cuanto a los niños y jóvenes la experiencia dependerá, en gran medida, del manejo que hagan los padres; si se maneja con calma la situación y se trasmite la información de manera apropiada, en la mayoría de los casos no se presentarán secuelas sicológicas de gran impacto. Si por el contrario los niños y jóvenes perciben un entorno cargado de ansiedad, serán mucho más vulnerables ante la situación.
En relación a los adultos, el manejo dependerá de los recursos sicológicos disponibles (cognitivos y emocionales), de la historia previa y vulnerabilidades preexistentes.
El impacto en los adultos mayores estará en relación a los cuidados que se les puedan brindar. Manifestaciones de ansiedad y depresión podrían presentarse, más aún cuando están físicamente distanciados. Se debe monitorear su estado físico permanentemente, cuidar que sus necesidades básicas estén adecuadamente satisfechas. Es fundamental estar en comunicación constante con ellos, de manera de brindar el apoyo emocional necesario y evitar los sentimientos de soledad.
En el caso particular de nuestra comunidad, ¿habría alguna especificidad en las consecuencias de tal aislamiento?
Nuestra comunidad, aun cuando está muy organizada, no estará exenta del impacto que acarreará esta situación de aislamiento prolongado, al igual que la población general. Esta situación traerá inevitablemente consecuencias en distintos niveles de la salud, económico y/o emocional. Las diferentes instituciones, y su personal, tendrán que abocarse a la asistencia de las personas afectadas, según sea el área de compromiso.
En este proceso deberían involucrarse todos aquellos profesionales que lleven a cabo las actividades rutinarias de nuestra comunidad, tales como maestros, orientadores, entrenadores, rabinos, entre otros, brindando apoyo, contención y detectando aquellos casos de mayor riesgo o vulnerabilidad y, si fuese necesario, referirlos a los profesionales correspondientes.
Por otra parte, vale la pena mencionar que la sensación de pertenencia que brinda la comunidad es un factor de protección importante en estas circunstancias.
¿Qué medidas recomienda para paliar el tedio, la sensación de encierro, la posible depresión?
Es importante asumir la realidad; se debe aceptar que estamos en una situación de riesgo, y cumplir las indicaciones médicas es indispensable.
Lo más importante es mantener la calma. No se debe perder de vista que esta situación es transitoria. Sin embargo, es relevante no poner fechas, puesto que no se puede predecir cuándo concluirá la cuarentena.
“La sensación de pertenencia que brinda la comunidad es un factor de protección importante en estas circunstancias”
Se debe evitar hablar permanentemente del tema y la sobreinformación, pues ello puede aumentar la sensación de riesgo y nerviosismo sin necesidad. Así, es importante limitarse a consultar los comunicados oficiales y aquellos provenientes de expertos en el área.
Ante la presencia de ansiedad, se debe identificar el pensamiento que pueda genera malestar. Pensar constantemente en el tema puede hacer que se acentúe el malestar emocional. Busque apoyo en su familia y amigos, y si siente que los síntomas lo rebasan recuerde que existe la posibilidad de buscar ayuda profesional.
Dentro de lo posible, es importante mantener una rutina. Se debe aprovechar para hacer aquellas cosas que le gustan pero que habitualmente no tiene tiempo para hacer (leer, ver películas, ordenar la casa, hobbies, ejercicio, etc.). Cuide los horarios y hábitos de alimentación, sueño e higiene. La rutina estructura y nos hace sentir más seguros. Pero también es importante dar tiempo para el ocio y el disfrute, de manera de evitar la sobrecarga y el agotamiento.
Para los niños que están en casa, proponga actividades recreativas como juegos de mesa, manualidades, bailes, dibujo, películas, cocinar.
Cambie de espacio físico, no pase todo el día en una misma habitación.
Manténgase en comunicación con sus seres queridos y amigos. No se aísle.
Como dijo Victor Frankl: “Cuando ya no somos capaces de cambiar una situación, nos encontramos ante el desafío de cambiarnos a nosotros mismos”.
¿Qué medidas estima que debería asumir la dirigencia de las instituciones comunitarias una vez finalice el aislamiento social?
Una vez que culmine la cuarentena, la dirigencia debe abocarse a retomar progresivamente las rutinas comunitarias en las diversas instituciones: colegios, centro comunitario, sinagogas, volviendo a sus actividades habituales.
Será necesario estar pendiente de las personas más vulnerables y que requieran algún tipo de apoyo. Asimismo, será fundamental apoyar a aquellas personas que eventualmente hayan sufrido alguna pérdida.
Se deberá promover una actitud de agradecimiento y de toma de conciencia de la importancia del colectivo, sacando los aprendizajes de esta situación para promover el bienestar ante fututas eventualidades.
“Se debe evitar hablar permanentemente del tema y la sobreinformación, pues ello puede aumentar la sensación de riesgo y nerviosismo sin necesidad”
¿Qué aprendizajes puede dejarnos esta circunstancia sin precedentes?
Lo importante de las situaciones extremas es poder sacar el aprendizaje, reconocer nuestras fortalezas y debilidades y poder trabajar en ellas.
Esta situación nos ha obligado a modificar nuestras rutinas, adquirir nuevas destrezas, descubrir fortalezas y recurrir a mecanismos que probablemente nunca habíamos empleado, pero que nos ayudarán a lidiar con las distintas realidades que debamos afrontar.
Debemos reconocer que ante estas circunstancias todos somos iguales, y que ello nos obliga a identificar lo que realmente es importante: la salud, la familia y la comunidad.
Francis Krivoy es Licenciada en Sicología por la Universidad Central de Venezuela, y tiene una especialización en Sicología Clínica de la misma casa de estudios. Ha realizado pasantías en Neurosicología en el Hospital Henry Ford de Detroit, así como en el Instituto de Neurosiquiatría de la Universidad de Illinois en Chicago.
Es profesora en la Escuela de Sicología de la Universidad Central de Venezuela, coordinadora del diplomado de Neurosicología Clínica de la UCV y el Centro Médico de Caracas, donde ejerce su práctica privada.
En 2018 se le otorgó la condecoración Honor al Mérito Académico.