La constante labor del Instituto Cultural Venezolano-Israelí ha quedado plasmada en el libro ICVI-60 años esclareciendo la historia, que se presentó a finales del año pasado tanto en la Feria del Libro del Oeste, celebrada en la Universidad Católica Andrés Bello, como en la librería “El Buscón” del Trasnocho Cultural.
La obra es producto del trabajo de Luis Daniel Álvarez, director de la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV y uno de los actuales directivos del ICVI.
A través de una recopilación detallada de actividades, hechos, personajes y fotografías, la obra sintetiza la inestimable labor que el ICVI ha llevado a cabo para crear vínculos culturales, científicos y humanos entre Venezuela y el Estado de Israel, desde que este último era apenas un recién llegado a la comunidad de naciones.
El presidente del ICVI, Freddy Malpica, expresó durante sus palabras de salutación: “La trayectoria del ICVI, que se inició en 1956 bajo la presidencia de don Mariano Picón Salas, representa el esfuerzo de varias generaciones de venezolanos que han promovido actividades de intercambio cultural, académico, científico y tecnológico entre nuestro país y la nación hebrea. Mas 1.600 becarios visitaron Israel para realizar cursos en universidades, centros de adiestramiento y pasantías en los kibutzim. También, numerosos intelectuales, políticos, artistas venezolanos visitaron Israel para conocer y aprender de la experiencia de la construcción de la nación hebrea. (…) Este libro nos permite evaluar el camino recorrido, y proponer nuevos retos para estar a la altura de los nuevos tiempos, signados por la revolución de la tecnologías de la información y las comunicaciones que permiten acortar el tiempo y las distancias. En ese sentido ya hemos iniciado contactos con universidades y centros de formación en Israel para el intercambio virtual en programas académicos”.
El prólogo del libro es de Andrés Eloy Blanco Iturbe, hijo del poeta y político Andrés Eloy Blanco, quien como presidente del Comité Venezolano Pro-Palestina Hebrea —predecesor del ICVI—, y luego como canciller de la República, cumplió un rol decisivo en el voto favorable de Venezuela en la ONU para la creación del estado judío, así como su posterior reconocimiento como Estado independiente.
María Fernanda Mujica, secretaria ejecutiva del ICVI, agradeció a alguien uqe no pudo estar presente: “Celina Bentata, como secretaria ejecutiva desde hace diez años, ha sido el alma del ICVI, su promotora y ejecutora. Ha ofrecido su casa para reunirnos y, especialmente, para dar cabida a un numeroso grupo de jóvenes universitarios con el fin de esclarecer lo que es Israel, junto al presidente del ICVI, profesor Freddy Malpica, y al comité directivo que desde la creación del instituto siempre ha estado compuesto por gente preparada y comprometida con Venezuela”.
Finalmente, Luis Daniel Álvarez manifestó que el ICVI ha sido “cristalino y diáfano como la lágrima de felicidad. Así ha transitado durante más de seis décadas de viaje y con su empeño se han tendido los elementos necesarios para su labor, teniendo en la conducción a grandes hombres del pensamiento venezolano, bajo la guía del señor Elieser Rotkopf y su señora Ena, a quienes, sin lugar a dudas, como hemos repetido en otras oportunidades, debe definírseles como la personificación o, mejor dicho, la humanización de este instituto. (…) Podemos decir con orgullo que este libro no es más que una introducción de 60 años, pues el ICVI, al ser esa «organización insustituible» como la han denominado, tiene un gran camino por delante en esta que Gallegos llamó «tierra de horizontes abiertos donde una raza buena ama, sufre y espera».