E n enero de 2009, grupos terroristas lanzaban a territorio israelí miles de cohetes y misiles, y mantenían en peligro y zozobra a la población de Israel.
Como un acto de protección a su soberanía y a sus nacionales, Israel decidió disminuir la capacidad operativa de los terroristas, quienes como de costumbre utilizan a la población civil (muchas veces en complicidad con ellos) para camuflar su actividad. En esos días la ofensiva fue realmente importante.
Los palestinos y todo el mundo árabe generaron una actividad mediática muy importante, que en Venezuela se veía tergiversada y manipulada por la cadena CNN en Español, donde se dedicaban muchas horas a trasmitir la noticia, opacando otras de mayor importancia. Israel, como siempre, ganó espacio en su estrategia militar, mas no a nivel de los medios, controlados por el capital del mundo árabe. Lamentablemente, Israel pelea por su soberanía y no por su imagen; esto es para mí un grave error.
El presidente Chávez, ante esa campaña mediática y como un gesto para fortalecer su geopolítica (errada desde mi punto de vista), decidió expulsar al embajador de Israel en ese momento en Venezuela, Shlomo Cohén. En su momento alertamos que su expulsión no contribuiría a la búsqueda de soluciones para el largo y difícil conflicto del Medio Oriente, ni a acercar posiciones que permitieran la convivencia entre los pueblos; más que un gesto de solidaridad con el pueblo palestino, fue definitivamente un apoyo al movimiento terrorista Hamás.
Este hecho produjo en la comunidad una conmoción, y marcó un antes y un después en la vida de los judíos en Venezuela, pues debemos recordar que somos una comunidad sionista, que jamás negó sus lazos ancestrales, ideológicos, familiares y religiosos con Israel, independientemente de que podamos haber criticado una política específica de alguno de sus gobiernos de turno. Recordemos que Venezuela fue de los primeros países que votó en la ONU a favor de la creación de Israel, y siempre lo apoyó; hubo relaciones importantes e ininterrumpidas entre ambos países.
Este acontecimiento inspiró a los dirigentes comunitarios a iniciar un intenso trabajo para poder revertir tal situación. Para quien suscribe, esta ha sido una obsesión. Se planificaron estrategias a nivel nacional e internacional, y no hemos descansado en la tarea. En su momento tratamos de convencer al presidente Chávez, pero particularmente pienso que, a pesar de su voluntad, la presión del lobby musulmán se lo impedía.
Con el presidente Maduro y la actual canciller siempre hemos tenido buenas relaciones; hay personas de la comunidad que mantienen amistad por diferentes circunstancias con el gobierno y sus representantes, y se sabe del trabajo que se ha hecho. No quiero hablar en primera persona; sin embargo, este asunto ha sido para mí una tarea sin descanso. Reconozco el trabajo de la CAIV, y muy especialmente el del rabino Isaac Cohén.
El pasado 17 de marzo, fuimos invitados a una reunión en la Casa Amarilla (sede de la Cancillería), donde la ministra Delcy Rodríguez nos informó oficialmente que el gobierno venezolano había aprobado una iniciativa para la apertura de consulados en ambos países, lo que implica que se retomarían las relaciones diplomáticas entre Venezuela e Israel. Es importante recordar que en días pasados la Cancillería de Israel había dado un paso adelante, manifestando estar dispuesta a esa apertura.
Esta noticia llega a la comunidad como un gran evento, y abre una esperanza de tranquilidad por la que tanto hemos luchado.
En este momento, estamos insistiendo para que a través de los mecanismos diplomáticos este proceso se concrete de la manera más rápida posible, anhelando que los funcionarios que se asignen en cada país sean personas con sensatez, y que entiendan que la diplomacia moderna debe estar conformada por individuos de alta capacidad intelectual, con habilidades en el manejo de temas económicos, conflictos, relaciones internacionales y mediación. Ojalá que los diplomáticos que se intercambien reúnan esas características.
Esperemos que a partir de hoy siempre se puedan dirimir y respetar las diferencias, pues no todos somos iguales y no pasa nada; la diplomacia tiene una llave que se llama el encuentro, que debe utilizarse.
Estamos haciendo seguimiento al asunto, y esperamos que este hecho se concrete lo antes posible, de forma rápida y sin traumas.
Este artículo apareció originalmente en el portal de la AJN (agenciaajn.com). Versión NMI.
Video de la contundente respuesta de Hillel Neuer, de UN Watch, a los representantes de varios países árabes que acusaban a Israel de “discriminación”, “abusos”, “limpieza étnica”, apartheid y otras “violaciones” contra los palestinos, en una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Véalo en Hatzad Hasheni: http://bit.ly/2mJpdTB
“Creo que llegó la hora de preguntarnos a dónde va el mundo, de examinarnos interiormente, y exteriormente a nuestro entorno, que hoy es todo el planeta, los acontecimientos, nuestras circunstancias y nuestro comportamiento”.
Léalo en nmidigital.com
1 Comment
GRACIAS A DIOS POR TAN GLORIOSA Y NECESARIA RELACIONES ENTRE VENEZUELA E ISRAEL, ESO ES LO QUE LA FALTA A ESTE PAÍS UNA RELACIÓN DE ESTRECHOS VÍNCULOS COMERCIALES, CULTURALES Y ESPIRITUALES CON LA NACIÓN PRIMOGÉNITA DE DIOS Y CON LAS MAS GRANDES PROMESAS DEL MESÍAS, ASÍ VENEZUELA PUEDE SER GRANDEMENTE BENDECIDA POR LA MANO DE DIOS… ¡BENDICIONES AL GOBIERNO DE VENEZUELA..!