Roger Waters, ex bajista y vocalista del mítico grupo de rock Pink Floyd, está llevando a cabo una gira por numerosos países, incluyendo a Latinoamérica, cuyo único propósito parece ser promover el odio contra Israel y los judíos. Waters, uno de los más fanáticos activistas de la campaña BDS, ha emitido en el pasado comentarios de corte antisemita “clásico” como que “los judíos consideran que la función de todos los no judíos en esta tierra es servirlos”. El músico incluso viste ropas que se asemejan a los uniformes nazis, y hace volar un enorme cerdo inflable —elemento tradicional en sus conciertos— en el que, entre otros símbolos de las organizaciones que aborrece, coloca una estrella de David. El Centro Simon Wiesenthal condenó la virulenta judeofobia de Waters, y ha solicitado a la institución financiera Citibank que cese el patrocinio de sus conciertos en México; en forma cínica, por cierto, Waters pregona lemas contra el capitalismo, aunque es una persona muy acaudalada y sus recitales han contado con el aval de firmas como American Express, que por cierto ya le retiró su apoyo. Un grupo de jóvenes judíos mexicanos se sumó a esta campaña, y manifestó en las afueras del lugar donde se presentó el personaje en la capital de su país, repartiendo franelas y afiches como el de la imagen y protestando en las redes sociales. Con información de diariojudio.com y wiesenthal.com