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La noche del 26 de octubre, una operación del Equipo Delta del Comando Conjunto de Operaciones Especiales de Estados Unidos (“Delta Force”) dio con el paradero de Abu Bakr al-Bagdadi, creador y líder del llamado Estado Islámico, quien murió en el ataque junto a varios miembros de su familia.
El escondite de al-Bagdadi se hallaba en la provincia siria de Idlib, cerca de la frontera con Turquía. Según los reportes, tras un breve enfrentamiento ocurrido mientras los operativos estadounidenses penetraban al lugar, el jefe terrorista quedó atrapado en un túnel y se suicidó al activar un cinturón explosivo, matando además a tres de sus hijos; dos de sus esposas también se hicieron estallar. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirmó la muerte de nueve personas, incluyendo el guardaespaldas de al-Bagdadi.
Iraq atribuyó a sus servicios de inteligencia haber localizado con precisión el sitio donde se encontraba al-Bagdadi.
El presidente de EEUU, Donald Trump, confirmó la noticia el domingo 27. La muerte del jefe de ISIS puede significar una disminución de las críticas que tanto demócratas como republicanos han hecho a la decisión de Trump de retirar las fuerzas militares de su país del noreste de Siria, que fue inmediatamente ocupado por los ejércitos de Turquía y Rusia. Los kurdos, que habían luchado junto a EEUU contra el Estado Islámico, han debido ahora pactar con el régimen de Bashar al-Assad para evitar un genocidio por parte de los turcos.
The Washington Post otorgó una inaudita dignidad a Abu Bakr al-Bagdadi en uno de los tres titulares sobre su muerte.
Se temía que ISIS ganara nueva fuerza a raíz del retiro estadounidense, pero la muerte de al-Bagdadi representa un golpe sicológico y organizativo para ese grupo, según analistas.
El iraquí al-Bagdadi fundó ISIS en 2014, a partir del capítulo local de al-Qaeda en Iraq que él había dirigido desde 2010. En la cúspide de su poder, el Estado Islámico controlaba un amplio territorio entre Iraq y Siria a lo largo de las cuencas del Tigris y el Éufrates, llegando incluso hasta las inmediaciones de Bagdad. Se financió fundamentalmente vendiendo en el mercado negro el petróleo producido en el área, sobre todo a Turquía, y contó como “soldados” con cientos de voluntarios que llegaron de muchos países del Medio Oriente y Europa.
Tras la caída de sus principales centros de poder, Mosul en Iraq y Raqa en Siria, al-Bagdadi se convirtió en un fugitivo; muchos de sus principales lugartenientes fueron posteriormente eliminados en ataques aéreos de EEUU. Su último mensaje público fue un audio difundido el 16 de septiembre. Sin embargo, se presume la existencia de numerosas “células dormidas” de ISIS alrededor del mundo.
Vocero de ISIS también fue eliminado
Al día siguiente de la muerte de al-Bagdadi, su mano derecha y el principal vocero de ISIS, Abu Hassan al-Muhajir, fue muerto al norte de Siria. “Al-Muhajir fue blanco de una operación coordinada entre la inteligencia de las Fuerzas Democráticas Sirias (kurdas) y el ejército de Estados Unidos en la aldea de Ain al-Baydah, cerca de Jarablus”, informó Mazloum Abdi, jefe de las FDS.
Los extraños titulares de The Washington Post
Al día siguiente de la muerte de al-Bagdadi, llamó la atención el cambio de titulares del diario The Washington Post en su portal web. Al principio la noticia estaba encabezada “Abu Bakr al-Bagdadi, terrorista jefe del Estado Islámico, muerto a los 48 años”. Pero poco después el titular cambió a “Abu Bakr al-Bagdadi, austero erudito religioso que encabezaba el Estado Islámico, muerto a los 48 años”, como si se tratase de un respetable académico que falleció pacíficamente en su cama.
Posteriormente hubo un nuevo cambio de titular: “Abu Bakr al-Bagdadi, líder extremista del Estado Islámico, muerto a los 48 años”.
Presumiblemente, el principal diario de la capital estadounidense quiso colocar titulares para todos los gustos.
Con información de The Jerusalem Post, The Times of Israel
y The Washington Examiner.
Ucrania abrirá extensión de su embajada en Jerusalén
El ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, agradeció a Ucrania su intención de abrir una oficina diplomática en Jerusalén como extensión de su embajada.
Katz explicó que la decisión llega tras un acuerdo entre el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, y el primer ministro Benjamín Netanyahu, y “fortalecerá el estatus de Jerusalén en el mundo”.
Ucrania será el cuarto país en adoptar una medida de este tipo, siguiendo los pasos de Honduras y Hungría, que abrieron oficinas comerciales con estatus diplomático, y la República Checa, que estableció un consulado honorario.
En diciembre de 2017, Estados Unidos reconoció a Jerusalén como la capital de Israel y trasladó allí su embajada. Guatemala siguió el camino de Washington y trasladó su embajada a la ciudad santa, igual que Paraguay; pero tras un cambio de gobierno, Asunción decidió regresar la legación diplomática a Tel Aviv. Debido a la tensión generada entre Israel y Paraguay por esta revocación, el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, anunció en septiembre la apertura de una oficina comercial en Jerusalén.
Del mismo modo, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien prometió durante su campaña electoral mudar la embajada a Jerusalén, adelantó en marzo que abriría una oficina en la capital, pero aclaró que solo de carácter comercial.
Con información de Diario Judío (México)
Sophie Wilmès, una judía, primera ministra de Bélgica
Por primera vez en la historia de Bélgica una mujer será primer ministro. Este no es el único hito que marca Sophie Wilmès, pues también será la primera persona judía en ocupar el cargo.
En las ultimas elecciones, la candidata del Movimiento Reformador (MR), un partido de centro-izquierda, venció al actual primer ministro Charles Michel, quien estará a la cabeza del gobierno provisional hasta que se forme una coalición de gobierno la cual, al igual que en Israel, lleva varios meses en la incertidumbre.
Sophie Wilmès, nueva primera ministra de Bélgica.
(Foto: Wikipedia)
Wilmès es nativa de Bruselas, madre de cuatro hijos, hija de una mujer asquenazí con un hombre no judío, y perdió varios familiares durante la Shoá. El presidente del Consistorio de la Comunidad Judía Belga, Philippe Markiewicz, comenta que “ella ocultó su identidad judía, parece ser un detalle privado de su biografía y no algo relacionado con ningún aspecto de formulación de políticas”. Markiewicz agregó que Wilmès asiste a los eventos de conmemoración de la Shoá, y la destaca como “una política trabajadora y comprometida”.
Wilmès perteneció al gabinete del saliente premier Michel, quien durante el año pasado ha tenido un período crítico en lo político, y de hecho, durante su viaje a la Unión Europea, fue reemplazado por Wilmès.
En ocasión de este nombramiento, el director de Relaciones Internacionales del Simón Wiesenthal, Shimon Samuels, solicitó a Sophie Wilmès que tome acciones con respecto al Carnaval de Aalst, ciudad belga en el que en forma reiterada desfilan carrozas con motivos virulentamente antisemitas, que incluso ridiculizan el Holocausto. Por ejemplo, en 2013 hubo actores que representaron a SS con sus víctimas en atuendo de campo de concentración, con latas marcadas como gas Zyklon B; este año 2019, una carroza mostraba judíos con atuendos ortodoxos que portaban monedas de oro y cargaban ratas, evocando claramente los peores ejemplos de propaganda nazi.
La Unesco incluye el carnaval de Aalst en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial, lo cual según Samuels constituye una afrenta, y solicitó que la próxima asamblea de ese organismo, a celebrarse en Bogotá en diciembre, lo excluya de esa importante lista.
Con información de Radio Jai y Diario Judío México
