El enfrentamiento bélico entre Israel e Irán, que hasta ahora se desarrollaba exclusivamente sobre territorio sirio y libanés, se ha extendido a Iraq. Esta guerra de baja intensidad consiste en ataques preventivos para evitar que el régimen de los ayatolas afiance su presencia militar en los países limítrofes con Israel, y para impedir que trasfiera armamento a Hezbolá (satélite de Teherán) y otros grupos terroristas.
En Siria: destrucción de drones “kamikaze”
La acción más dramática ocurrió sobre territorio sirio la noche del 24 de agosto. Jonathan Conricus, vocero militar israelí, informó que aviones de Tzáhal llevaron a cabo bombardeos en la localidad de Aqrabah, al sureste de Damasco y cerca del aeropuerto de esa ciudad, para impedir un ataque con drones “suicidas” cargados de explosivos que planeaban la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní y milicias chiítas. El objetivo de los drones era causar estragos en poblaciones y bases militares del norte de Israel.
Conricus señaló que Tzáhal había estado monitoreando esos planes desde hacía meses, y que dos días antes había logrado impedir que Irán llevara a cabo un atentado similar desde las cercanías del Golán. El vocero indicó también que aunque las fuerzas iraníes habían lanzado cohetes desde Siria hacia territorio israelí tres veces en el año 2018, el uso de drones “kamikaze” constituye una nueva táctica. “La amenaza era significativa, esos drones asesinos eran capaces de llegar a sus objetivos con una capacidad [destructiva] importante”.
Los drones llegaron hace varias semanas desde Teherán al aeropuerto de Damasco, y fueron almacenados en Aqraba. Cuando el 22 de agosto cuatro combatientes proiraníes se aproximaron a un punto de lanzamiento en la localidad de Erneh, en el límite con los Altos del Golán, Tzáhal decidió lanzar un primer bombardeo para desbaratar los planes iraníes.
Poco antes del anuncio de Conricus, la agencia oficial de noticias siria, SANA, había informado —con su característica veracidad— que sus defensas antiaéreas habían sido activadas contra misiles israelíes, y que “la mayoría fueron destruidos antes de alcanzar sus objetivos”.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, ONG que cuenta con informadores sobre el terreno, precisó que dos milicianos de Hezbolá y un combatiente de la Fuerza Quds murieron en el ataque contra la base de Aqraba.
Israel ha desplegado el sistema antimisiles Cúpula de Hierro en el norte, previendo alguna represalia iraní.
Un dron “suicida” de la Guardia Revolucionaria iraní. Estos artefactos han sido utilizados en la guerra civil de Yemen. (Foto: AFP)
En Iraq: depósitos de armamento
Funcionarios militares estadounidenses revelaron esta semana a The New York Times que Israel bombardeó un depósito de armas iraní en territorio de Iraq el pasado 19 de julio. Sería la primera vez que Tzáhal lleva a cabo un ataque en Iraq en casi cuatro décadas, desde que destruyó el reactor nuclear Osirak de Sadam Hussein en 1981.
El diario árabe Asharq al-Awsat, que se publica en Londres, reportó que Israel ha realizado tres ataques en suelo iraquí contra instalaciones iraníes, tras haber llegado a un acuerdo con EEUU y Rusia. Por su parte, el asesor de seguridad nacional iraquí, Falih al-Fayad, indicó que su gobierno “aún no ha determinado” quién estuvo detrás de esos bombardeos. La última explosión en una instalación iraní en Iraq ocurrió el 22 de agosto.
La empresa israelí de análisis satelital ImageSat International mostró que en el ataque más reciente fueron destruidos varios contenedores y depósitos nuevos y “demasiado grandes”.
El primer ministro Benjamín Netanyahu confirmó que Israel actúa contra Irán en el Líbano, Siria e Iraq. En una entrevista ofrecida al Canal 9 de televisión, expresó: “Nosotros no le damos inmunidad a Irán en ningún lugar”. El mandatario puntualizó que Irán está estableciendo bases contra Israel en Iraq, Yemen, Siria y el Líbano, y destacó que le ha dado al establishment de defensa libertad de acción y directrices para impedir la consolidación iraní en esos países.
En el Líbano: ¿freno al programa de misiles de precisión?
El 25 de agosto se produjo un ataque con drones contra una instalación de Hezbolá en Beirut, que tanto ese grupo como el gobierno libanés atribuyeron a Israel. Uno de los aparatos estalló frente a un edificio —dañando lo que presuntamente es una “oficina de prensa” de Hezbolá— en Dahie, suburbio de la capital libanesa que es un feudo del grupo terrorista, mientras que el otro se estrelló, al parecer debido a una falla técnica.
En un principio, analistas israelíes indicaron a los medios que las fotos del dron estrellado que divulgó Hezbolá no parecían ser de un aparato israelí sino iraní. Sin embargo, nuevos reportes publicados por The Times of Israel señalan que los objetivos principales del ataque habrían sido una costosa mezcladora industrial que se utiliza para producir combustible sólido para cohetes, y una unidad de control computarizado. La misión habría tenido éxito, lo que retrasaría durante al menos un año los planes del grupo terrorista de desarrollar misiles de precisión de largo alcance. Los funcionarios israelíes se han negado a comentar sobre el asunto.
Según medios libaneses, el ejército de ese país cree que los vehículos aéreos no tripulados despegaron desde un rango de 8 kilómetros del sitio de la explosión, lo que indica que partieron desde dentro del propio Líbano o llegaron desde el mar.
Según el diario British Times, el objetivo del ataque eran dos grandes cajas que contenían materiales para el programa de Hezbolá que busca convertir sus cohetes simples en misiles guiados de precisión, un proyecto que preocupa profundamente a Israel pues aumentaría significativamente la amenaza planteada por esos proyectiles. El año pasado, el primer ministro Benjamín Netanyahu había denunciado con todo detalle estos planes ante la Asamblea General de la ONU. Según funcionarios de defensa israelíes, el grupo terrorista aún no ha logrado sus fines y solo posee un pequeño número de misiles guiados.
De acuerdo con las informaciones de prensa israelíes, la mezcladora era el objetivo más significativo, ya que se requiere para fabricar el combustible sólido que utilizan los misiles de largo alcance, y era la única máquina de ese tipo en el Líbano. El costoso y delicado aparato, que resultó inutilizado por el ataque, habría llegado recientemente desde Irán, y estaba depositado en Dahie antes trasferirlo a la fábrica donde se lleva a cabo el proyecto de misiles de precisión.
Con información de Aurora, The Times of Israel, World Israel News y El País (Madrid)
Los lazos israelí-ucranianos han entrado en una “nueva era”, expresó el primer ministro Benjamín Netanyahu tras reunirse el 20 de agosto en Kiev con el primer ministro ucraniano, Volodymyr Groysman. Esta fue la primera visita de un mandatario israelí a Ucrania desde 1999.
Entre los logros del viaje, informó Netanyahu, se cuenta la decisión de Ucrania de abrir una oficina de alta tecnología en Jerusalén, que según él espera “será el primer paso para abrir una embajada” en esa ciudad. También se aprobó un proyecto de turismo para la localidad de Uman, que decenas de miles de israelíes visitan cada año para rezar en la tumba del Rebe Najman de Bratzlav.
Lo más importante, según Netanyahu, fue el compromiso personal que recibió del presidente Volodymyr Zelensky de impulsar en el parlamento una ley que permitirá recibir pensiones a los israelíes nacidos en Ucrania que emigraron a Israel después de que ese país se independizó de la Unión Soviética en 1991. Actualmente viven en Israel unos 8.000 judíos de origen ucraniano.
Netanyahu y Groysman asistieron a un evento de innovación con empresarios y funcionarios de la industria local, donde Groysman agradeció a Netanyahu por la ayuda israelí para establecer un ecosistema de innovación de alta tecnología en Ucrania. Israel y Ucrania firmaron un Acuerdo de Libre Comercio a principios de enero.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, en Kiev. Tanto Zelensky como el primer ministro de su país, Volodymyr Groysman, son judíos, en un país con una larga historia de antisemitismo. (Foto: GPO)
Con información de The Jerusalem Post.
El gobierno de Paraguay reconoció como grupos terroristas globales a Hezbolá, Hamas, al-Qaeda e ISIS, anunció el 19 de agosto el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor.
“Este decreto obliga a desplegar un protocolo de seguridad, fundamentalmente en el área del financiamiento de las actividades de estas organizaciones, sus brazos armados (…) para llevar adelante la lucha contra el terrorismo internacional», manifestó Villamayor.
La resolución indica que tanto Hezbolá como Hamás “continúan realizando operaciones internacionales, varias de ellas en el Hemisferio Occidental”. ISIS y al-Qaeda, en tanto, “constituyen una grave amenaza a la seguridad individual y colectiva de los ciudadanos dentro y fuera de sus territorios. (…) El Estado paraguayo coopera decididamente en la lucha mundial contra el terrorismo en cualquiera de sus manifestaciones, mediante la ratificación de varios tratados y convenciones internacionales, además de su firme apoyo en la ONU y la OEA en la lucha contra el terrorismo global e internacional”, agrega el comunicado.
De acuerdo a lo consignado por el diario local ABC Color, las autoridades de inteligencia paraguayas cuentan con información sobre los vínculos entre Hezbolá y el grupo criminal de Brasil Primer Comando de Capital (PCC), que operan en las ciudades fronterizas. El PCC es señalado de lavar dinero para narcotraficantes y la organización terrorista libanesa. Villamayor remarcó la necesidad de ser precisos en las acciones en la zona de la Triple Frontera, compartida con Brasil y Argentina, donde Hezbolá está involucrado en el tráfico de drogas, el robo de propiedad intelectual y lavado de dinero.
Según la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA), Hezbolá ha establecido una red en América Latina para trasportar cocaína a Estados Unidos y Europa. Esa red mantiene relaciones comerciales con los cárteles de la droga latinoamericana, especialmente de México, Colombia y Venezuela. Se estima que Hezbolá recibe unos 30 millones de dólares al año de sus actividades en América Latina, dinero que destina a mantener su estructura militar y financiar sus actividades en el Líbano.
Brasil está considerando sumarse a la definición de Hezbolá como grupo terrorista, según informó la agencia Bloomberg. Sin embargo, la medida no cuenta con amplio apoyo, pues ello podría tensar las relaciones de Brasil con Irán, principal promotor de la organización extremista, que importa productos brasileños por 2.500 millones de dólares al año. También existe el temor de que el país se convierta en blanco del terrorismo.
Argentina también reconoció a Hezbolá como grupo terrorista en julio, en el marco de los 25 años del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) perpetrado por extremistas de esa organización libanesa.
Con información de Infobae.
¿Será uno de ellos el sucesor de Netanyahu?
El primer ministro Benjamín Netanyahu indicó que considera al actual jefe de la agencia de inteligencia Mossad, o al embajador de Israel en Estados Unidos, como posibles sucesores cuando abandone la vida política.
“Hay dos personas que considero adecuadas para dirigir el Estado de Israel: Yossi Cohen y Ron Dermer”, dijo Netanyahu, citado el 15 de agosto por el sitio de noticias Walla, en un raro comentario sobre el futuro liderazgo del país después de su retiro.
Las fuentes políticas que escucharon el comentario le dijeron a Walla que no estaban sorprendidas de que no hubiese mencionado a “peces gordos” del Likud, como el popular diputado Gideon Saar o el ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan.
Netanyahu, el primer ministro con más años de servicio en Israel, dice que no tiene planes de abandonar el cargo a pesar de las acusaciones penales en su contra. Durante mucho tiempo se le ha acusado de hacer a un lado a posibles rivales que podrían amenazar su liderazgo en el partido Likud.
Según Walla, no se cree que Dermer, de 48 años, tenga ningún interés en seguir una carrera política cuando finalice su cargo diplomático después de las elecciones de septiembre (Netanyahu ha dicho que va a extenderlo por un año). El jefe de espionaje Cohen, sin embargo, podría estar aspirando a un puesto superior cuando expire su mandato como jefe del Mossad, aunque actualmente lo niega.
Cohen, de 57 años y ex asesor de seguridad nacional de Netanyahu, se convirtió en jefe del Mossad en 2016, sucediendo a Tamir Pardo. Su mandato (hasta donde se conoce públicamente) se ha centrado en combatir el programa nuclear iraní y cultivar lazos con los Estados árabes sunitas.
Confidente cercano a Netanyahu, Dermer se opuso vehementemente al acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Teherán y seis potencias mundiales, incluido Estados Unidos. Él orquestó la invitación a Netanyahu para dirigirse al Congreso y criticar el acuerdo, lo que enojó a la administración de Obama, y ha supervisado la mejoría de los lazos diplomáticos bajo el gobierno de Trump.
Con información de The Times of Israel