El escrutinio definitivo tiene el viernes como fecha límite
El avance del escrutinio de las elecciones israelíes del 23 de marzo no refleja mayorías claras en el Parlamento israelí (Knesset) para formar el 24º gobierno de la historia del país, pendiente de la entrada de un partido menor cuyo apoyo puede permitir o impedir el desbloqueo político.
El recuento confirma al centrista Yesh Atid, de Yair Lapid, como segunda fuerza más votada, y al centroizquierda del Partido Laborista y la formación Azul y Blanco de Benny Gantz bien posicionados.
El partido islamista Raam, separado de la Lista Unida árabe, superaría el umbral electoral, con un mínimo de cuatro diputados que podrían garantizar la mayoría del bloque parlamentario liderado por Netanyahu, o del contrario, compuesto por un heterogéneo grupo de partidos, de complejas alianzas.
Actas de votación de las misiones diplomáticas israelíes en el exterior esperan ser escrutadas en el Comité Central Electoral. Representan miles de votos que podrían cambiar el balance de poder en estas elecciones
(Foto: CCE/Israel Hayom)
El Comité Central Electoral de Israel espera terminar el recuento de votos de los centros regulares esta tarde, pero todavía quedarían 450.000 papeletas llamadas de «doble sobre»: diplomáticos, militares, contagiados de coronavirus y ciudadanos en cuarentena. No se esperan resultados definitivos hasta el viernes por la tarde.
La participación final de estos comicios, los cuartos en menos de dos años, ha sido del 67,2 %, la más baja desde 2013, con poco más de 4,4 millones de votantes de los 6,5 que tenían derecho a voto.
Destino de Netanyahu está en manos de Bennett
Este miércoles por la mañana el primer ministro Benjamin Netanyahu y su partido Likud parecían estar cerca de la victoria, aunque su destino aún depende del líder de Yamina, Naftali Bennett.
El bloque de derecha de partidarios de Netanyahu tiene actualmente 52 mandatos; el bloque de centro izquierda tiene 56 escaños, pero los siete escaños de Yamina, y ahora los cinco de Raam, podrían ir a cualquiera de los dos bloques para darle la mayoría que necesita.
Poco después de que se publicaran las encuestas a boca de urna, Bennett dijo: «Solo haré lo que sea bueno para el Estado de Israel», sin dar más detalles.
Escaños a la Knesset según el escrutinio parcial, a las 10 am hora de Israel
(Fuente: Israel Hayom)
Se espera que contar los votos sea mucho más desafiante en esta elección, debido a la gran cantidad de “sobres dobles”, que incluyen a unos 600.000 soldados de las FDI, policías, presos y guardias, representantes diplomáticos en el extranjero y personas que se encuentran aisladas debido al virus. El Comité Central Electoral ha empleado 6500 escrutadores, que tienen hasta el viernes por la noche, antes del comienzo del Shabat, para completar su tarea.
Los resultados ponen a ambos bloques al alcance de formar una coalición, siempre que Yamina se una a uno de ellos. Sin embargo, como Bennett ha prometido no unirse a un gobierno liderado por Netanyahu o por el jefe de Yesh Atid, Yair Lapid, no está claro hacia dónde se dirige el partido nacional-religioso.
Fuente: Israel Hayom, EFE y Aurora.
Traducción y versión NMI.