Usando sistemas computarizados construidos en Israel, los médicos examinan a los refugiados en la frontera entre Ucrania y Moldavia, e incluso realizan ultrasonidos prenatales
Nathan Gefay*
En una oficina cerca de Tel Aviv, un médico revisa los pulmones de un refugiado ucraniano que se encuentra a 2000 kilómetros de distancia. Es parte de un nuevo “hospital virtual” con personal médico israelí que atiende a personas heridas o desplazadas por la invasión rusa.
Atienden a los pacientes con una variedad de soluciones tecnológicas, muchas de ellas creadas en Israel, que ofrecen a los refugiados exámenes físicos, ultrasonidos prenatales, monitoreo de signos vitales, análisis de muestras de sangre y una variedad de otros controles.
Los médicos trabajan en el Centro Médico Sheba, el hospital más grande de Israel, mientras que los pacientes están en Chisinau (Kishinev), la capital de Moldavia. En esta ciudad, cercana a la frontera con Ucrania, Sheba dispone de un médico y varios voluntarios que ayudan a los pacientes a interactuar con los especialistas en Israel. El equipo de Sheba es parte de una delegación enviada por United Hatzalá, la organización de rescate con sede en Jerusalén.
Sara Misk, refugiada ucraniana que está embarazada, conversa con médicos en Israel desde Moldavia empleando el sistema de telesalud Sheba Beyond
(Foto: Centro Médico Sheba)
“He estado tratándolos a todos. Hay madres embarazadas, y hombres y mujeres mayores que sufren una variedad de dolencias causadas por el largo e increíblemente estresante viaje para cruzar la frontera”, dice Gadi Segal, jefe de telemedicina interna de Sheba. “Además, niños y pacientes crónicos que necesitan análisis de sangre avanzados urgentes. Y todos ellos son atendidos desde mi oficina en Sheba”.
Señala que la telemedicina israelí avanzó mucho durante la crisis del coronavirus: “Con la pandemia aprendimos cómo la telemedicina puede revolucionar la atención de la salud, y se está usando para tratar virtualmente a los refugiados desde Israel. Se están aboliendo los límites de la geografía y la distancia. Podemos ejecutar el mejor juicio clínico y las mejores consultas profesionales para pacientes en una zona de guerra, e incluso en la línea del frente”.
El dispositivo de ultrasonido desarrollado por la startup israelí PulseNmore utiliza un teléfono inteligente para obtener y trasmitir la imagen del feto a un especialista
(Foto: Hadashot)
Uno de los sistemas en uso, PulseNmore, es un dispositivo de ultrasonido prenatal portátil que toma imágenes en cualquier lugar y las envía para su análisis al departamento de obstetricia y ginecología de Sheba en Israel. TytoCare verifica los pulmones, el corazón, la boca, los oídos, la piel, la temperatura y los niveles de saturación de oxígeno de los niños refugiados, mientras que las unidades de Biobeat Medical Technologies monitorean los signos vitales y los muestran en el tablero del médico remoto en tiempo real.
Sarit Lerner, jefa de tecnología de Sheba Beyond, el programa de telemedicina del hospital, agrega que su equipo comenzó a actuar tan pronto como reconoció la necesidad. “Sentimos la obligación moral de proporcionar la tecnología y la experiencia de los médicos y especialistas de Sheba para ayudar a estos refugiados”.
*Corresponsal de ciencia y salud de The Times Of Israel.
Fuente. The Times of Israel.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.