Más de 100 niños huérfanos judíos ucranianos lograron escapar de la guerra y cruzar a Rumania, gracias al acompañamiento y ayuda del Cónsul de Israel en Bucarest. Ahí los recibieron con medias, mantas, calentadores de manos y otros insumos para que no pasen frío en medio del invierno europeo.
El cónsul de Israel, Roni Shabtai, expresó: “Este es uno de los momentos más impactantes de mi vida. En nombre del Estado de Israel les deseo una vida mejor… que tengan bendiciones y éxito”.
Un total de 113.100 ciudadanos ucranianos han llegado a Rumanía tras huir de la invasión rusa de su país, según datos publicados por la Policía de Frontera rumana. Una parte sustancial de estos refugiados han entrado desde Moldavia, a cuyo territorio habían cruzado para salir de Ucrania. De ellos, 68.100 han abandonado ya el territorio en dirección a otros países donde tienen familia.
Parte de los huérfanos judíos en Rumania, esperando su vuelo a Israel
(Foto: EFE)
Entre los refugiados hay también miles de estudiantes extranjeros de Asia, África y América del Sur. Según informan medios locales, unos 800 estudiantes indios han sido alojados en una sala de deportes de una localidad rumana junto a la frontera con Ucrania, a la espera de que su embajada los repatrie.
Decenas de estos estudiantes se han quejado de la lentitud con la que se ponen a su disposición vuelos de retorno. Los estudiantes deploran también el trato recibido por los guardias de frontera ucranianos. Según algunos testimonios, los funcionarios dan prioridad a las mujeres, ancianos y niños ucranianos que también huyen de la guerra en detrimento de los estudiantes de otros países, lo que ha hecho que hayan tenido que esperar más horas en la frontera que los ciudadanos ucranianos.
Fuente: Comité Central Israelita del Uruguay (cciu.org.uy) y EFE.
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