Desde el último Yom Hazicarón, en total 1594 soldados y civiles murieron en combate o a causa del terrorismo en Israel.
Las cifras las dieron a conocer las autoridades, marcando el año más mortífero para las fuerzas de seguridad y los civiles del país en cinco décadas, y llevando el número total de víctimas a 30.134.
Según el Ministerio de Defensa, 760 soldados murieron mientras prestaban el servicio militar durante el año pasado. Otros 61 veteranos con discapacidad fallecieron debido a complicaciones por lesiones sufridas durante su servicio en años anteriores.
Las cifras elevan el total a 25.034 muertos durante su servicio al país desde 1860, año a partir del cual Israel, y antes de él la comunidad judía de la región (yishuv), comenzó a contar sus soldados caídos.
Las cifras anuales incluyen además a todos los soldados, agentes de policía, agentes del Shin Bet (Agencia de Seguridad Interior) y agentes de seguridad civiles, ya sea en el cumplimiento del deber o como resultado de un accidente, enfermedad o suicidio.
En medio de la guerra en curso, que comenzó el 7 de octubre con el ataque del grupo terrorista Hamás en el sur de Israel, 711 soldados y miembros de las fuerzas de seguridad han perdido la vida. Esto incluye 598 soldados de las FDI, 39 agentes de seguridad locales, 68 agentes de policía y seis miembros del Shin Bet. La gran mayoría de las muertes se produjeron en medio del ataque terrorista, y durante la actual ofensiva terrestre de Israel contra Hamás en Gaza.
Soldados trasportan el ataúd de su compañero Elkana Vizel durante su funeral en el cementerio militar del Monte Herzl en Jerusalén, el 23 de enero pasado
(Foto: The Times of Israel)
La última vez que Israel enfrentó un número tan elevado de muertes entre las fuerzas de seguridad en un año fue durante la Guerra de Yom Kipur (1973).
Un funcionario del Ministerio de Defensa dijo que su unidad, encargada de la conmemoración de las tropas caídas, se ocupó de un gran volumen de entierros que normalmente habrían correspondido a un total de 15 años. “Desafortunadamente, desde el estallido de las hostilidades llevamos a cabo muchos funerales, en algunos lugares bajo el fuego de cohetes y temiendo una infiltración terrorista. Ampliamos los cementerios, con el objetivo de llevar a los caídos a su lugar de descanso final con respeto”, expresó Aryeh Moalem.
Según el Instituto Nacional de Seguros, también se agregaron 834 nombres a la lista de víctimas civiles que perecieron en ataques terroristas durante el año pasado, la gran mayoría de ellos durante la masacre del 7 de octubre, lo que eleva el total a 5100 desde 1851.
En medio de la guerra, principalmente durante el ataque del 7 de octubre, 822 civiles (531 hombres y 291 mujeres) murieron. Se trata del mayor número de muertes de civiles en muchas décadas. Entre ellos hubo 40 niños menores de 18 años, y 68 ciudadanos extranjeros.
El Instituto Nacional de Seguros indicó que 12 de los muertos del último año perecieron en ataques terroristas antes de la guerra. Esto incluye a Jana Najenberg, quien resultó gravemente herida en un ataque terrorista contra la pizzería Sbarro en Jerusalén en 2001 y sucumbió a sus heridas el año pasado.
El Día de los Caídos (Yom Hazicarón) en Israel comenzará este domingo por la tarde, cuando una sirena de un minuto sonará en todo el país. El lunes por la mañana sonará una sirena de dos minutos antes de las ceremonias conmemorativas nacionales en los 53 cementerios militares de Israel. Durante Yom Hazicarón, grandes sectores del público israelí suelen visitar las tumbas de sus seres queridos y amigos.
Debido a preocupaciones de seguridad, el número de asistentes a la ceremonia anual en el Monte Herzl se reducirá a 25.000 personas, unas 5000 menos que en 2023.
Fuente: VisÁVis / The Times of Israel.
Versión NMI.
