L os clubes de fútbol chinos que contrataron a estrellas como los delanteros Carlos Tevez, Hulk y Alexandre Pato, ven cómo el israelí Eran Zahavi los supera a todos en la parte superior de las listas de goleadores.

Su hazaña de alcanzar 23 goles en 22 apariciones esta temporada de la Super Liga China (CSL) es aún más notable cuando se considera que juega por un modesto Guangzhou R&F que está de sexto en la tabla de 16 equipos.

El internacional israelí también costó una fracción de muchos de sus compañeros más famosos, por cuanto Guangzhou invirtió solo 7,2 millones de euros para atraparlo desde el Maccabi Tel Aviv, en junio del año pasado.

Su cantidad de anotaciones lo coloca muy por delante del segundo mejor goleador de la CSL, el delantero brasileño de Guangzhou Evergrande Ricardo Goulart (16 goles), y otros delanteros caros de gran renombre.

Zahavi celebró su cumpleaños el mes pasado: “Tengo 30 años, pero siento que tengo 25”, asegurando que está en la mejor etapa de su vida. “Estoy enfrentando nuevos desafíos en China, la liga se está desarrollando y trato de ayudar al fútbol chino a progresar localmente y en todo el mundo”, afirmó Zahavi.

Si continúa con esta seguidilla, los equipos de Europa pueden estar olfateándolo. Fue en la competencia principal del continente que anotó su gol más memorable, una “chilena”, para Hapoel Tel Aviv contra el Lyon en 2010.

“El gol que anoté en la fase de grupos de la Liga de Campeones fue muy especial para mí. Cuando tenía cinco años veía partidos de la Liga de Campeones y le pedía a Dios que me brindara la oportunidad de participar en estos juegos para demostrar mi calidad al mundo, y ser famoso por el fútbol. Y cuando llegas a este momento y marcas un gol tan bonito en la competencia más importante del mundo, te sientes orgulloso de ti mismo. Todo el duro esfuerzo puesto en mi carrera había dado resultado”, dice satisfecho.

Los goles de Zahavi y su particular habilidad de anotar contra su clásico rival, Guangzhou Evergrande, campeones reinantes de la CSL, lo han convertido en un favorito de los fanáticos.

Antes de China, Zahavi hizo la mayor parte de su carrera en Israel, a excepción de un paso sin éxito por Italia en Palermo, donde anotó solo dos veces en dos años antes de trasladarse al Maccabi en 2013.

Está prosperando bajo la dirección ofensiva de Dragan Stojkovic, internacional por la ex Yugoslavia. “Hacemos un juego de pases y en la mayoría de los partidos controlamos el juego, siempre marcando goles. A veces sufrimos con nuestro juego defensivo, porque avanzamos demasiado sin pensar mucho en el oponente. Creo que a la gente en China le gusta ver el R&F y cómo jugamos”, indica Zahavi.

Aunque Zahavi está disfrutando de la vida y el fútbol en China, admite que se pierde la UEFA Champions League, que siempre fue su meta.