El sentimiento de solidaridad se ha fortalecido dentro del sector ultraortodoxo, el religioso, los inmigrantes de la antigua Unión Soviética y los olim de otros países
Una nueva encuesta realizada por One Million Lobby y el Centro Menomadin para la Ley Judía y Democrática revela que, tras el inicio de la guerra entre Israel y Hamás, el 70% del público israelí siente una conexión más profunda con la sociedad judía en Israel y la diáspora, y 61% cree que debería adoptarse un nuevo enfoque religioso para preservar la unidad de Israel.
La organización One Million Lobby representa a los 1,2 millones de israelíes de habla rusa ante las autoridades.
Israelíes inmigrantes durante la conmemoración en Jerusalén de los 25 años del comienzo de la gran aliá de la ex Unión Soviética, en 2015
(Foto: Flash90)
La encuesta fue realizada por el Instituto Shiluv y analizada por la firma Sphinx; participaron 456 hombres y mujeres de 18 años o más en una muestra nacional, aleatoria y representativa de la población judía israelí que habla hebreo.
Los resultados del estudio también abordan perspectivas en torno a cuestiones de religión. Los resultados indican que los israelíes están más inclinados a apoyar cambios significativos en el ámbito de la relación entre religión y Estado, la cuestión de “quién es judío” y leyes sobre el estatus personal (matrimonio y divorcio) que proporcionen un sentido de pertenencia a cualquiera que se vea a sí mismo como parte del pueblo judío y del Estado de Israel, que no necesariamente puede ser reconocido como judío por la Halajá.
En términos de solidaridad con la diáspora, aproximadamente el 70% de la población judía en Israel siente una conexión más profunda. El sentido de solidaridad se ha fortalecido significativamente dentro del sector ultraortodoxo (78%), el sector religioso (84%), entre los inmigrantes de la ex Unión Soviética (75%) y los inmigrantes de otros países (85%).
En cuanto a la relación entre la religión y el Estado de Israel, una clara mayoría de la población judía israelí (61%) cree que el Gran Rabinato debería adoptar un enfoque halájico que se alinee con las posiciones del público israelí para preservar la unidad del pueblo. Solo el 23% expresó su oposición a este aspecto.
Según la encuesta, el 71% del público ve a las personas que sirven en el ejército y que son Zera Israel, descendientes de un judío que por alguna razón no es considerado judío según las reglas halájicas, como parte del pueblo judío. Sólo el 22% expresó oposición a esta postura.
La mayoría del público (68%) cree que alguien que haya servico en el ejército o en el servicio nacional y sea Zera Israel tiene derecho a ser sepultado en un cementerio judío sin separación alguna; solo el 18% expresó su oposición a esto. Un porcentaje similar (67%) apoya la propuesta de un proceso de conversión acelerado para los soldados que deseen someterse a ella, frente al 21% que se opone.
En cuanto al tema del matrimonio civil, que es extremadamente polémico en la sociedad israelí, la mayoría del público judío (65%) exige que el Estado proporcione soluciones matrimoniales a los israelíes Zera Israel que desean casarse con judíos; 23% expresó su oposición.
“En medio de esta guerra en nuestro hogar durante los últimos 100 días, nunca nos hemos sentido más unidos, y nuestro destino compartido nunca ha tenido un significado más real”
Alex Rief, director ejecutivo de Million Lobby Association
La opción del matrimonio civil para cualquiera que no desee casarse a través del Rabinato cuenta con el apoyo del 61% del público, mientras que el 26% expresa su desacuerdo. Aunque la oposición al matrimonio civil proviene en principio del público religioso y ultraortodoxo, parece que dentro de la comunidad religiosa hay una relativa apertura: el 24% de esta población apoya la idea, y 16% es indiferente al tema.
Alex Rief, director ejecutivo de Million Lobby Association, comentó sobre los resultados de la encuesta: “En medio de esta guerra en nuestro hogar durante los últimos 100 días, nunca nos hemos sentido más unidos, y nuestro destino compartido nunca ha tenido un significado más real”.
Rief continuó: “A medida que pasan los días parece que, a diferencia de los tomadores de decisiones que regresan a la rutina del 6 de octubre, involucrándose en una política mezquina, en la difamación y la misma visión de corto plazo, el público israelí está unos pasos por delante. Está dispuesto a afrontar las complejas cuestiones de la sociedad israelí, a decidir y a garantizar la pertenencia e igualdad a todo el que comparta el destino judío. Ha llegado el momento de que los tomadores de decisiones se den cuenta de la magnitud del momento, del poder de la unidad en la lucha del pueblo, y de pasar de las palabras a los hechos”.
Fuente: The Jerusalem Post.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.