Quienes hayan estado desplazados internamente durante más de un año podrán recibir subvenciones de hasta 25.360 shékels por adulto y 12.680 por cada niño
Sharon Wrobel*
El Ministerio de Finanzas presentó el 5 de enero un plan de compensación de 3400 millones de shékels (927 millones de dólares) para ayudar a que miles de residentes evacuados de las maltrechas comunidades del norte de Israel regresen a sus hogares a principios de marzo, después de más de un año de lucha contra Hezbolá.
“La clave para regresar a casa es la seguridad, y no vamos a ceder en este asunto”, dijo el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, en una conferencia de prensa en Jerusalén. “Los residentes del norte estarán regresando a una realidad de seguridad diferente, y nos aseguraremos de que la tranquilidad se mantenga durante años”.
El anuncio del plan de regreso a casa se produce después de largos retrasos y numerosas quejas de los residentes de las comunidades del norte de Israel, que han estado desplazados internamente durante más de un año. Según el plan de compensación, quienes regresen a sus hogares el 7 de marzo recibirán subvenciones por un máximo de 25.360 shékels por adulto y 12.680 por cada niño, para un máximo de siete niños. Por ejemplo, una familia con padre, madre y cuatro hijos recibiría una subvención total de 101.440 shékels (unos 27.700 dólares).
Una casa arrasada por cohetes de Hezbolá en Metula, al norte de Israel, fotografiada en noviembre de 2024. Unas 10.000 estructuras resultaron destruidas por los ataques desde el Líbano
(Foto: Reuters)
Estas subvenciones constan de dos vías: una para ayudar con el regreso a casa, y otra para compensar a los repatriados por los daños indirectos sufridos por sus hogares tras permanecer abandonados durante más de un año. Las viviendas que sufrieron daños por ataques directos, como cohetes, pueden recibir una compensación gubernamental para reparaciones por parte de la autoridad fiscal de la propiedad.
Las familias con niños tendrán la opción de permanecer en sus ubicaciones actuales y en alojamiento financiado por el Estado para poder terminar el año escolar, y regresar a sus hogares en el norte en junio. Sin embargo, el tamaño de su subvención de regreso a casa se reducirá con el tiempo, mientras que la elegibilidad para la subvención por vivienda no se verá afectada.
Decenas de comunidades en el norte del país fueron evacuadas después de la masacre del 7 de octubre en 2023, cuando el grupo terrorista Hezbolá comenzó a lanzar ataques casi diarios desde el otro lado de la frontera con el Líbano. Unos 60.000 habitantes del norte siguieron desplazados durante los meses de lanzamiento de cohetes por parte de Hezbolá.
Incluso después de un tenue alto el fuego entre Israel y Hezbolá, que entró en vigor a finales de noviembre y expirará a finales de este mes, muchos residentes de los kibutzim fronterizos que se encuentran en alojamientos financiados por el Estado, como hoteles, han estado preocupados por su seguridad y temen que la paz no se mantenga.
Estas subvenciones constan de dos vías: una para ayudar con el regreso a casa, y otra para compensar a los repatriados por los daños indirectos sufridos por sus hogares tras permanecer abandonados durante más de un año. Las viviendas que sufrieron daños por ataques directos, como cohetes, pueden recibir una compensación gubernamental para reparaciones por parte de la autoridad fiscal de la propiedad
Durante la conferencia de prensa, el diputado Zeev Elkin, jefe de la Dirección de Rehabilitación del Norte, dijo que de los 3400 millones de shékels presupuestados también se asignarán fondos a las autoridades locales, para preparar el regreso de los residentes en marzo. Estos fondos se destinarán en parte a garantizar que las instituciones educativas, como escuelas y guarderías, vuelvan a abrir y funcionen, aunque algunos residentes decidan aplazar su regreso a casa hasta junio.
“Para mí, el mensaje no son sólo las subvenciones, sino que exista un plan de acción para que nuestros residentes regresen a sus hogares”, comentó Moshe Davidovich, director del Consejo Regional Mateh Asher de Galilea Occidental. “El regreso a una vida normal, la rehabilitación y el crecimiento de las comunidades de Galilea y de la frontera son de suma importancia para nosotros”.
“El gobierno israelí debe plantearse esto como una misión nacional centrada en la educación, el bienestar, los negocios, la agricultura y el turismo, para que el norte vuelva a crecer”, exigió Davidovich.
*Periodista.
Fuente: The Times of Israel.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.