Un grupo que surgió modestamente hace seis décadas con el fin de acercar a los pueblos venezolano e israelí, se ha venido adaptando a los tiempos y hoy cumple una labor fundamental en esta etapa crítica de la relación entre ambos países
Redacción NMI
E n 1948, una vez declarada la independencia de Israel, el joven Estado procedió a establecer relaciones diplomáticas con muchos países del mundo. Paralelamente, aparecieron diversas organizaciones orientadas a desarrollar un acercamiento distinto a los canales formales, con el fin dar a conocer los diversos ángulos de la realidad israelí.
Ya en 1951 se constituyó en nuestro país un Comité Pro-Centro Cultural Venezolano-Israelí, con el fin de fomentar vínculos culturales y educativos. Esto se materializó en 1956 —en plena dictadura militar— con el nacimiento del Instituto Cultural Venezolano-Israelí, cuyo primer presidente fue el reconocido hombre de letras Mariano Picón Salas.
Debe mencionarse que, para aquel momento, las relaciones entre los dos países aún no tenían el nivel de embajada; esto solo se materializaría en 1960, cuando Arie Orón se convirtió en el primer representante plenipotenciario del Estado judío en Venezuela, y Vicente Gerbasi en el primer embajador venezolano en Jerusalén.
El primer acto de envergadura auspiciado por el ICVI fue la presentación de la novela Doña Bárbara en hebreo, en traducción realizada por la Universidad Hebrea de Jerusalén. Este evento se efectuó en el Círculo Militar de Caracas el 22 de enero de 1964 y, además del autor y ex presidente Rómulo Gallegos, asistieron el presidente en ejercicio, Rómulo Betancourt, así como la esposa del presidente electo, Menca de Leoni, y otras personalidades de la vida nacional.
El ICVI entró luego en una fase de afianzamiento, en la que su directiva, encabezada ahora por el académico Luis Villalba Villalba, se enfocó en consolidar la organización en la esfera internacional. En 1974 se llevó a cabo en Caracas la Primera Conferencia Continental de Institutos Culturales América Latina-Israel, a la que asistieron representantes de 16 países del continente y que contó con la presencia del embajador Yaacov Tsur, entonces presidente del Instituto Central de Relaciones Culturales Israel-Iberoamérica, España y Portugal.
Durante la década siguiente, el ICVI incorporó en su membresía a destacadas figuras de la sociedad civil y de todas las tendencias políticas, con nombres como Valmore Acevedo Amaya, Luis Álvarez Domínguez, José Curiel, Claudio Fermín, Miguel Ángel Burelli Rivas, monseñor Pío Bello Ricardo (ex rector de la Universidad Católica Andrés Bello), monseñor Alfredo Rodríguez, además de intelectuales y gente del mundo artístico como Arturo Uslar Pietri, René De Sola, Emil Friedman, Salvador Garmendia, Juan Nuño, Marisela Padrón Quero, Luis Alberto Crespo, José Ramón Medina, José Rodríguez Iturbe, Adolfo Salgueiro, Carlos Sequera Yépez y Alfredo Tarre Murzi.
En 1988 asumió la presidencia del ICVI Luis Manuel Carbonell, destacada figura de la ciencia nacional, quien además se había desempeñado como ministro de Educación. En esta época el instituto desarrolló un importante programa editorial, al publicar tres obras de gran relevancia. La primera de ellas, en 1989, fue Apuntes de historia judía de Anita Glass Olamy (esposa del entonces embajador de Israel en Venezuela, Janán Olamy), basada en varios cursos que había dictado esta destacada intelectual. Ese mismo año se publicó Israel visto por ojos venezolanos, extraordinaria recopilación de testimonios de decenas de figuras de la vida pública nacional que habían visitado el Estado judío desde su fundación hasta finales de la década de 1980.
En 1990 se reeditó Olivos de eternidad, antología bilingüe (español y hebreo) de poemas de Vicente Gerbasi, quien, como se ha mencionado, fue el primer embajador venezolano en Israel. La traducción al hebreo corrió a cargo de Pnina Navé.
Posteriormente el ICVI organizaría numerosos eventos artísticos, ahora bajo la presidencia del médico, historiador y político Blas Bruni Celli, entre los que pueden destacarse conciertos como el de la Orquesta Sinfónica Venezuela con motivo del 55 aniversario del Estado de Israel, en 2003. En 2007, al conmemorarse 60 años de la resolución de la ONU que condujo a la creación de Israel, el embajador Fernando Gerbasi, hijo de Vicente Gerbasi, dictó una conferencia en la UIC, tras la cual se presentó la Schola Cantorum de Venezuela bajo la dirección del maestro Alberto Grau.
En aquel momento el instituto mantuvo una fuerte vinculación con el embajador israelí en Venezuela Shlomo Cohén, uno de los grandes propulsores de las relaciones culturales y científicas entre ambos países, y quien a la sazón había presidido el Instituto Cultural Israel-Iberoamérica, España y Portugal, con sede en Jerusalén.
En septiembre de 2008 asumió la presidencia del ICVI el ex rector de la Universidad Simón Bolívar y directivo de la Comisión Latinoamericana de Universidades, Freddy Malpica. La nueva directiva tenía planes de fortalecer la cooperación técnica y cultural con Israel, pero poco después el gobierno venezolano rompió unilateralmente sus relaciones con el Estado judío. Nuestra comunidad quedaba sumida en el desconsuelo y, puede afirmarse, en situación de orfandad.
Estas nuevas circunstancias obligaron a replantear el enfoque en las actividades del instituto, que debió asumir un rol en el que prevaleciera la hasbará (esclarecimiento) sobre el Estado de Israel ante la intensa campaña “antisionista” desarrollada a través de los medios oficiales venezolanos. Frente a este nuevo reto, el ICVI tuvo la ventaja de ser una entidad autónoma que podía adaptar rápidamente la orientación de sus actividades.
Para llevar a cabo una tarea tan fundamental, el instituto se ha concentrado en desmitificar y trasmitir un conocimiento real sobre Israel, a través del análisis y el debate, en un tono de altura que contrasta con los ataques tendenciosos y distorsionantes que se hacen permanentemente contra el Estado judío. Como afirma Elieser Rotkopf, quien forma parte de la directiva del ICVI desde hace varias décadas, el instituto “asumió la responsabilidad del esclarecimiento y de difundir los avances científicos de Israel, con énfasis en la medicina”.
Desde que Freddy Malpica asumió la presidencia, se había decidido incorporar a jóvenes no comunitarios en las actividades del ICVI. Este proceso se aceleró a partir de 2011, cuando comenzaron a realizarse pequeños seminarios con estudiantes universitarios. Celina Bentata, quien en aquel momento asumió la secretaría general de la institución, explica: “El primer seminario lo hicimos un fin de semana, en la casa de uno de nosotros, con un grupo de 20 muchachos que no tenían ninguna idea del Judaísmo ni del Estado de Israel. Pensamos que tal vez los que vinieron el primer día no vendrían al siguiente, por lo denso de las presentaciones; pero para nuestra sorpresa hubo más asistentes, pues trajeron amigos por lo impactados que quedaron con las ponencias”.
Este éxito obligó a buscar ubicaciones con mayor capacidad; de los salones pequeños de la sede de la B’nai B’rith se pasó, poco después, a la gran sala de eventos.
Durante los últimos años el ICVI ha ofrecido varios seminarios cada año, que cuentan con una asistencia que en ocasiones ha superado los 200 estudiantes y profesores universitarios, quienes incluso acuden desde otras ciudades del país; frecuentemente los propios jóvenes invitan a sus compañeros, y son los mejores difusores del esclarecimiento sobre Israel y el Judaísmo. Este proceso ha llevado a que el ICVI formalice la incorporación como miembros de su equipo a varios de estos verdaderos embajadores y difusores de la hasbará, en el carácter de promotores institucionales.
Entre los temas abordados en los seminarios han estado el terrorismo, las relaciones entre Venezuela e Israel, y el impacto de los cambios económicos en el conflicto del Medio Oriente y en Venezuela, con destacados ponentes nacionales e internacionales (ver recuadro). También se aprovechan aniversarios relevantes, como la independencia de Israel, Yom Hashoá o la resolución de partición de Palestina, para difundir conocimientos sobre esos eventos históricos.
El instituto también ha efectuado algunas actividades fuera de Caracas, como la llevada a cabo en 2015 en la alcaldía de Maracay bajo el título de “Conociendo el Estado de Israel: historia y vínculo con Venezuela”.
Entre sus planes para el futuro, el ICVI contempla la creación de su portal en internet, medio que permitirá potenciar el alcance de sus actividades. Como afirma Celina Bentata: “A pesar de la crítica situación del país no hemos dejado de tener actividades, ya que sentimos que hay que seguir cultivando las relaciones entre Venezuela e Israel para beneficio de sus pueblos”. Elieser Rotkopf corrobora: “Trabajamos por difundir el prestigio social y moral del Judaísmo y el Estado de Israel”.
Junta directiva del ICVI
Comité Ejecutivo
Presidente: Freddy Malpica.
Director General: Elieser Rotkopf.
Secretaria General: Celina Bentata.
Integrantes: Milos Alcalay, Elías Farache, Vanessa Acosta Friedman, Arnoldo J. Gabaldón, Sadio Garavini, José Toro Hardy, Sary Levy, María Fernanda Mujica, Julio César Pineda, Daniel Varnagy.
Directores: José Antonio Abreu, Oscar Arnal, Gustavo Arnstein, Andrés Eloy Blanco Iturbe, Laura Castillo de Gurfinkel, César Egaña, Moisés Garzón, Fernando Gerbasi, Mariano Gurfinkel, Carolina Jaimes Branger, Elisa Lerner, Andrés Mata Osorio, Miguel Henrique Otero, Teodoro Petkoff, Adolfo Salgueiro, Armando Scannone, Benjamín Scharifker, María Eugenia Tortoledo, Luis Ugalde s.j., Luis José Uzcátegui.
Promoción Institucional: Luis Daniel Álvarez, Daniel Lara, Guillermo Miguelena, Theodorakis Rodríguez.
Algunos de los conferencistas en los seminarios recientes del ICVI
Adolfo Salgueiro, Alberto Moryusef, Andrés Eloy Blanco Iturbe, Arnoldo Gabaldón, Asdrúbal Aguiar, Bayardo Ramírez Monagas, Daniel Varnagy, Delsa Solórzano, Efraim Lapscher, Elías Farache, Elie Habadian, Froilán Barrios, Gabriel Ben Tasgal, Jesús Ollarves, Joaquín Rodríguez Alonso, José Guerra, José Toro Hardy, Julio César Pineda, León Shaúl, Leonardo Buniak, Mario Nassí, Milos Alcalay, rabino Shui Rosenblum, Sadio Garavini, Trudy Spira (Z’L).
Una carta de Shimon Peres
Estimado profesor Freddy Malpica:
Me es muy grato dirigirme a usted en su calidad de presidente del Instituto Cultural Venezolano-Israelí, y expresar un cálido saludo a los integrantes del mismo con ocasión del 64° aniversario de la independencia del Estado de Israel.
La especial relación de amistad que une a los pueblos de Venezuela y de Israel es de larga data, desde el voto favorable de Venezuela a la creación del Estado de Israel, y para nosotros es muy importante fortalecer dicho vínculo.
La destacada labor cultural que realiza el instituto contribuye de manera significativa a este propósito, y quisiera felicitarlos por tan valioso aporte.
Tengo hermosos recuerdos de mis visitas a Venezuela, de su gentilicio, de su vibrante comunidad judía, y valoro especialmente el Doctorado Honoris Causa que me fue conferido por la Universidad Simón Bolívar.
Les deseamos que sigan cosechando éxitos en promover las relaciones entre Venezuela e Israel por medio de sus valiosas iniciativas culturales.
Shimon Peres, presidente de Israel
Mayo de 2012
Fuentes:
1 Comment
Un gran saludo a Freddy Malpica,
cordialmente,
Michelle Bussieres