A pesar de casi dejarlos morir de hambre, el grupo terrorista utiliza técnicas especiales para hacerlos parecer saludables y con más energía
Hamás ha implementado un proceso de “rehabilitación acelerada” para los rehenes antes de su liberación. La organización terrorista, según un informe del canal 12 israelí, proporciona a los rehenes alimentos nutritivos y productos estimulantes poco antes de su liberación, para crear la impresión de que han sido bien tratados durante su cautiverio.
Esta práctica ha salido a la luz en medio de la liberación gradual de rehenes en curso. El informe afirma que Hamás se asegura de que los rehenes liberados parezcan enérgicos y en buenas condiciones a su regreso a Israel. Sin embargo, los testimonios de mujeres recientemente liberadas pintan un cuadro completamente diferente de su cautiverio.
Las rehenes Naama Levy, Daniella Gilboa, Karina Ariev y Liri Albag, durante el espectáculo que montó el grupo terrorista Hamás antes de entregarlas a la Cruz Roja el pasado 25 de enero
(Foto: AP)
Las rehenes recién liberadas dijeron a las autoridades israelíes, según N12, que bebieron agua de mar y comieron solo pan y arroz. Otras revelaron que fueron retenidas en duras condiciones, en túneles subterráneos e incluso jaulas. N12 señala que las medidas previas a la liberación forman parte de los esfuerzos de Hamás por influir en la percepción pública sobre el trato que reciben los secuestrados.
Cuatro rehenes —Karina Ariev, Liri Albag, Daniella Gilboa y Naama Levy— fueron liberadas el sábado pasado del cautiverio de Hamás. Además, Emily Damari, Romi Gonen y Doron Steinbrecher fueron dadas de alta del Centro Médico Sheba después de una semana de controles médicos tras su regreso a casa.
Fuente: The Jerusalem Post.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.