El último presidente de la URSS es recordado por permitir que los judíos practicaran su religión libremente y emigraran, lo que para su decepción hicieron en masa
Judah Ari Gross*
Organizaciones judías lamentan la muerte de Mijaíl Gorbachov, recordándolo como el líder que levantó la Cortina de Hierro y permitió que unos dos millones de judíos soviéticos practicaran su religión libremente o emigraran, lo que hizo la gran mayoría.
Gorbachov, quien estuvo en el poder entre 1985 y 1991, lideró la política de glasnost o apertura, permitiendo a los judíos soviéticos practicar abiertamente su fe, hablar idish y hebreo, imprimir y distribuir publicaciones judías y estudiar textos judaicos. Eventualmente, abrió completamente las puertas de la Unión Soviética y permitió que los judíos emigraran, la mayoría de ellos hacia Israel, pero también muchos hacia Estados Unidos, Canadá y Europa.
Entre 1989 y 1999, más de tres cuartos de millón de judíos soviéticos emigraron a Israel, según datos recopilados por Mark Tolts de la Universidad Hebrea de Jerusalén. El investigador señala que la población judía de la antigua Unión Soviética se redujo de más de dos millones en 1970 a menos de un cuarto de millón en 2019. Después de la invasión rusa de Ucrania de este año, se ha reducido en 31.000 adicionales.
(Foto: AP)
Como el primer, último y único presidente de la Unión Soviética —que hasta entonces había sido gobernada por un presidente del Presídium del Soviet Supremo—, Gorbachov reconoció públicamente en 1991 lo que se sabía desde hacía mucho tiempo: la Unión Soviética tenía un problema de antisemitismo. “Los brotes venenosos del antisemitismo surgieron incluso en suelo soviético”, escribió Gorbachov en un discurso que pronunció un asistente suyo en 1991 en Babi Yar, Ucrania, lugar de una masacre masiva de judíos durante el Holocausto. “La burocracia de Stalin, que públicamente se desvinculó del antisemitismo, de hecho lo usó como un medio para aislar al país del exterior y fortalecer su posición dictatorial con la ayuda del chauvinismo”, dijo Gorbachov en lo que en ese momento fue la más franca condena del antisemitismo por parte de un funcionario soviético.
Por su papel en permitir el renacimiento del judaísmo en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, y en permitir que la mayoría de los judíos del país eventualmente emigraran, Gorbachov es elogiado como estadista y humanista por las principales organizaciones y líderes judíos. “Descanse en paz, Mijaíl Gorbachov, cuyos esfuerzos para abrir la sociedad soviética ayudaron a poner fin a la Guerra Fría y a la persecución del gobierno contra millones de judíos, que no podían vivir abiertamente ni emigrar libremente”, escribió en Twitter William Daroff, director ejecutivo de la Conferencia de Presidentes de las Mayores Organizaciones Judías Estadounidenses.
Gorbachov, sin embargo, lamentó el hecho de que tantos judíos soviéticos decidieran abandonar el país, creyendo que ello provocaría una fuga de cerebros. “Hemos establecido el derecho a emigrar. Pero, para decirles francamente, lamentamos mucho el hecho de que nuestros compatriotas [judíos] se vayan, que el país esté perdiendo tanta gente talentosa, hábil y emprendedora”, dijo Gorbachov en el evento de 1991 en Babi Yar.
“La burocracia de Stalin, que públicamente se desvinculó del antisemitismo, de hecho lo usó como un medio para aislar al país del exterior y fortalecer su posición dictatorial con la ayuda del chauvinismo”, dijo Gorbachov en lo que en ese momento fue la más franca condena del antisemitismo por parte de un funcionario soviético
El rabino Pinjas Goldschmidt, presidente de la Conferencia de Rabinos Europeos y ex Gran Rabino de Moscú, escribió en un tuit que “tres millones de judíos soviéticos le deben [a Gorbachov] su libertad”.
El Comité Judío Estadounidense, una de las organizaciones que más fervientemente abogaron por los judíos soviéticos, elogió a Gorbachov por otorgar mayor libertad al pueblo soviético, liberar a los presos políticos y permitir el éxodo de los judíos.
“El Congreso Judío Mundial lamenta la muerte de Mijaíl Gorbachov, un gran estadista, defensor de la libertad y los derechos humanos, y un verdadero amigo del pueblo judío, que a través de sus acciones permitió que innumerables judíos soviéticos regresaran a su herencia. Expreso mis más profundas condolencias a su familia”, expresó en un comunicado el presidente del CJM, Ronald S. Lauder.
*Corresponsal de temas sobre religión y diáspora de The Times of Israel.
Fuente: The Times of Israel.
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.