El 23 deJulio se llevó a cabo el acto de graduación de la sexagésima Promoción de Bachilleres del Colegio Moral y Luces “Herzl-Bialik”, que lleva el nombre de Orot Shel Tikvá, “Luces de Esperanza”, y está integrada por 42 graduandos. El acto se llevó a cabo en el Auditorio Jaime Zighelboim.
La mesa directiva del acto estuvo conformada por el rabino Samuel Garzón; Denny Cohen, vicepresidente del Sistema Educativo Comunitario; Eunice Witschi , directora del Liceo; y los padrinos de promoción, profesores Jheyson Landaeta, Nily Sedaka y Alirio Hidalgo.
La profesora Witschi saludó así a los graduandos: “Salgan de aquí con alegría, el colegio queda atrás. Sí, los estamos echando. Ya es hora de irse, de probar las alas. Los amish tienen la costumbre de permitir que los jóvenes vivan fuera de su comunidad por un año, para conocer otros ambientes y diferentes personas. Casi todos regresan. De la misma forma ustedes regresarán. A su hogar cuando terminen de formarse, a su comunidad como líderes, y a su colegio como voluntarios. Cuando regresen, Venezuela les abrirá las puertas porque será otra, de eso tengo el optimismo que da el ser realista. Vayan sin miedo, están preparados. El mundo está hecho de maror y jaroset. Pero ustedes están listos: cómanselo completo. Disfruten la experiencia, vivan…”
Por su parte, el padrino Alirio Hidalgo expresó: “Jóvenes, es muy importante ser buenas personas, porque como ya se dijo en su despedida, ser una buena persona está infravalorado. Qué maravilloso sería el mundo si la gente no solo se preocupase por su felicidad y comodidad sino por la de todos; no es que anden por el mundo complaciendo a todos y tratando de resolverles la vida, pero que por lo menos no ‘frieguen’ a los demás por tratar usted de ser exitoso… Gracias por permitirme tener el honor de ser su padrino de promoción, y espero que todos tengan una vida feliz y llena de mucha prosperidad siempre”.
Antes de procederse a la entrega de los títulos, la alumna Esther Wainberg ofreció unas palabras en representación de los graduandos, y en especial a sus compañeros de promoción. Empleando la metáfora de un equipaje, rememoró lo que se lleva de su vida escolar: los principios y valores, la identidad judía, el amor por Venezuela y por Israel, los recuerdos del colegio, los amigos y compañeros.
“(…) Como adolescentes tuvimos que vivir por formar parte de la época mas turbulenta de nuestro país, y hoy quiero aprovechar estas líneas para decirles que aunque parezca irónico ganamos mucho; aprendimos a valorar, a ser solidarios, a colocarnos en los zapatos del otro, a discernir entre lo realmente importante y lo que no lo es, a ser agradecidos, a amar aún más a nuestro país, a entender lo privilegiados que somos de pertenecer a la mejor comunidad judía del mundo donde nos sentimos siempre seguros y protegidos, y sobre todo aprendimos a ser compasivos, aprendimos sin duda a ser mejores seres humanos, y muy pronto si Dios quiere tendremos la oportunidad de demostrarlo.
(…) “Sé que aunque la vida nos separe por caminos diferentes, siempre tendremos un lazo inquebrantable que nunca podrá romperse, porque haber compartido tantos momentos juntos nos hace protagonistas de una historia en común llena de recuerdos que se avivarán con una llamada, con un encuentro y con la promesa de siempre estar el uno para el otro”.
Una vez culminada la entrega de los títulos se procedió al brindis en honor a los graduandos, en el cual la profesora Debby Milgram, en representación de las madres de los alumnos, ofreció unas cálidas palabras.
Felicidades a todos nuestros graduandos por haber alcanzado esta meta en sus vidas. El SEC les desea mucho éxito en esta nueva etapa, y recuerden siempre que el colegio tendrá eternamente sus puertas abiertas para recibirlos con cariño, como lo hemos hecho a lo largo de todos estos años.
Como es tradición, se otorgaron reconocieron a los estudiantes destacados por su desempeño a lo largo de sus cinco años del bachillerato:
– Placa “Morá Fania Lapscher” por sus excelentes notas en materias judaicas: Amy Schmidmajer Obermeister.
– Alumno con el Mejor Promedio en materias generales y el mejor promedio global de primero a quinto año: Amy Schmidmajer Obermeister.
– Premio Alumno Integral, otorgado por parte de los docentes de quinto año a aquel alumno que se caracterizó por ser buen compañero, colaborador, tolerante, respetuoso, con alto rendimiento académico: Amy Schmidmajer Obermeister.
– Premio “Itzjak Rabin”, como reconocimiento por parte de sus compañeros a un alumno destacado por ser colaborador, tolerante, buen compañero, respetuoso y ejercer un liderazgo positivo: Perla Hanono Truzman y Joseph Benzaquen Cohen.
Además, se entregaron placas a los padrinos de la promoción, Jheyson Landaeta, Nily Sedaka y Alirio Hidalgo; a la Dirección del Liceo, en la persona de su directora, Eunice Witschi; y a la Sociedad de Padres (SOPRE), que fue recibida por Sabrina Serruya.