Ana Jerozolimski*
Mientras el mundo continúa lidiando con las repercusiones del coronavirus y la necesidad de tomar precauciones, inclusive cuando ya se comienzan a implementar estrategias graduales de salida, prosiguen los esfuerzos científicos por hallar la vacuna y por desarrollar medicamentos que puedan curar el Covid-19.
Israel juega un rol preponderante en estos esfuerzos. Lo más notorio de los últimos días, fue un anuncio desde el Instituto Israelí de Investigación Biológica en Nes Tziona, sobre el logro de un anticuerpo que puede ser la base de un remedio para curar Covid-19.
Por separado, la Universidad Hebrea de Jerusalén confirmó el desarrollo de un antibiótico inyectable con un nuevo modo de acción, que podría ser clave para combatir infecciones bacterianas provocadas, entre otros, por el coronavirus.
Profesor Yehezkel Barenholz, de la Escuela de Medicina del Hospital Universitario Hadassah.
En un comunicado oficial publicado directamente por el Ministerio de Defensa de Israel, del cual depende el Instituto Israelí de Investigación Biológica (IIBR en sus siglas inglesas), la terminología fue tajante: “En los dos últimos días, el Instituto Israelí de Investigación Biológica ha completado un desarrollo científico que abre caminos, determinando un anticuerpo que neutraliza el Coronavirus (SARS-CoV-2)”. El comunicado oficial explica los tres parámetros claves del hallazgo:
1. El anticuerpo es monoclonal, nuevo y refinado, y contiene una proporción excepcionalmente baja de proteínas dañinas.
2. El Instituto ha demostrado la habilidad del anticuerpo en la neutralización del Coronavirus.
3. El anticuerpo ha sido examinado específicamente con el agresivo coronavirus.
“Sobre la base de un (análisis) exhaustivo de publicaciones científicas en todo el mundo, parecería que el Instituto Israelí de Investigación Biológica es la primera institución que logra un hallazgo científico que responde simultáneamente a los tres parámetros antes mencionados. Este es el resultado de la gran experiencia del Instituto y las capacidades únicas de sus científicos”, dice el comunicado del Ministerio de Defensa israelí.
Claro está que lo que tendría el Instituto entre manos es el potencial para avanzar decididamente hacia el hallazgo de un medicamento que cure de coronavirus, y no una vacuna que le impida entrar a las células. “Este es un hito importante que será seguido de una serie de complejos tests y un proceso de aprobaciones regulatorias”, aclara el Instituto a través del Ministerio de Defensa. “Habiendo aclarado este punto, los científicos del instituto consideran que la naturaleza de este logro puede conducir a una reducción del proceso, que se prolongaría por unos meses”.
El próximo paso es el registro para patentar el desarrollo del Instituto Israelí de Investigación Biológica, tras lo cual se contactaría a productores internacionales.
Como es sabido, el coronavirus provoca una serie de complicaciones en el cuerpo humano —muchas más que los conocidos problemas respiratorios—, entre ellas infecciones que pueden terminar siendo la causa inmediata de muerte. Investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén han desarrollado un antibiótico inyectable con un nuevo modo de acción, que podría combatir la mortalidad en pandemias como la actual. Así lo anunció Yisum, la compañía de trasferencia tecnológica de la mencionada universidad.
Lo que los científicos lograron hacer fue reformular un antibiótico ya conocido, el Mupirocin, de modo que pueda ser aplicado de forma intravenosa, lo cual crea nuevas propiedades para combatir bacterias resistentes. Según un comunicado de la universidad, diferentes estudios han mostrado que cerca del 50% de los fallecimientos de Covid-19 están relacionados con infecciones bacterianas secundarias.
El problema, claro está, no comenzó con el coronavirus. Según la Organización Europea de Resistencia de Antibióticos (AMR), todos los años mueren aproximadamente 700.000 personas a causa de infecciones resistentes a antibióticos. “Para pacientes internados, con sistemas inmunológicos debilitados como es el caso de quienes padecen de COVID-19, el peligro es grave”, dice el comunicado de la Universidad Hebrea. “El uso intensivo de antibióticos durante esta pandemia se espera que acreciente más aún este problema”.
El profesor Yehezkel Barenholz, jefe de la investigación, señaló que “la habilidad de tomar una droga existente y modificar su modo de actuar puede tener un impacto significativo en el problema de la resistencia a antibióticos e infecciones bacterianas secundarias relacionadas con el COVID-19. Eso puede abrir el camino para una nueva forma de tratamiento”.
Los investigadores han obtenido buenos resultados en modelos animales, y esperan llevar a cabo el próximo paso, los experimentos clínicos, o sea en seres humanos.
El innovador tratamiento se efectuó utilizando un programa de inteligencia artificial desarrollado por Barenholz, jefe del Laboratorio de Investigacion de la Membrana y el Liposoma en la Escuela de Medicina del Hospital Universitario Hadassah, en colaboración con la doctora Ahuda Cern y el profesor Amiram Goldblum, todos de la Facultad de Medicina de la Universidad Hebrea.
*Periodista, directora de Semanario Hebreo (Montevideo)
y Semanario Hebreo Jai.
Fuente y foto: Semanario Hebreo Jai. Versión NMI.