El domingo 9 de febrero se llevó a cabo en el Centro Cultural Chacao la sesión especial del Concejo Municipal de ese municipio capitalino, con motivo al Día Internacional en Conmemoración de la Memoria de las Víctimas del Holocausto y 80 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, según la resolución 60/7 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Este acto se desarrolla anualmente bajo la coordinación del concejal Máximo Sánchez y la Comisión de Capital Humano de Chacao, y comenzó a realizarse hace varios años por iniciativa del exconcejal Shully Rosenthal.
Cabe destacar que la Alcaldía de Chacao adoptó en 2022 la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional de Recordación del Holocausto (IHRA por sus siglas en inglés), siendo la única entidad venezolana que lo ha hecho hasta ahora.
La sesión contó con la participación del alcalde Gustavo Duque y el Concejo Municipal en pleno, así como miembros del cuerpo diplomático, sobrevivientes de la Shoá y sus descendientes, representantes del Comité Venezolano de Yad Vashem, Espacio Anna Frank, los coordinadores de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela (CAIV), el CSCDR Hebraica y otras instituciones comunitarias, además de directivos de las universidades Monte Ávila, Católica Andrés Bello, Central de Venezuela y Metropolitana, y público en general.
Como maestro de ceremonias fungió Germán Méndez, Licenciado en Educación con especialización en Teoría del Conocimiento, y docente en el Colegio Moral y Luces Herzl Bialik.
El orador de orden fue el historiador e investigador Tomás Straka, quien hizo un paralelismo entre la situación del año 2015, cuando ofreció una ponencia sobre el tema del Holocausto en la que se había referido al ataque terrorista contra la revista Charlie Hebdo en París y la entonces indetenible expansión del Estado Islámico, con lo que sucede en 2025, tras el pogromo de Hamás contra Israel y el aumento del antisemitismo en todo el mundo.
El presidente del Comité Venezolano de Yad Vashem, Tomás Osers, se dirigió al público haciendo hincapié en la importancia de la educación y la difusión de información sobre el Holocausto a las futuras generaciones, y recordó palabras de sobrevivientes de la Shoá que ya no nos acompañan pero dejaron un importante legado a las nuevas generaciones y al país. Osers mostró una manta que su padre, Harry Osers, recibió de los aliados tras sobrevivir al campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, la cual utilizó posteriormente en sus viajes familiares a los Andes venezolanos.
Uno testimonio conmovedor fue el de la profesora Jadwiga Cepińska, nuera de Seweryn e Irena Cepiński, quienes fueron honrados con el título de “Justos entre las Naciones” por Yad Vashem en el año 2001.
Cepińska narró como sus suegros escondieron a una familia judía Romana Kalińska, su esposo Bolesław Kapłan y su hijo pequeño de seis años, en una granja cercana a Lwow (entonces en Polonia y actualmente parte de Ucrania), arriesgando sus vidas, y habiendo debido enfrentar incluso una denuncia anónima ante la Gestapo, que afortunadamente pudo sortearse con astucia y valentía y gracias a documentos falsos.
Pero los Cepiński perdieron su casa, que fue saqueada y quemada por antisemitas poco después, por el hecho de haber protegido a una familia judía.
La profesora Cepińska concluyó: “Hoy quiero rendir homenaje a mis suegros, a su memoria y a su legado, que sigue vivo en nuestras familias y en la historia compartida de aquellos a quienes ayudaron. Ellos no solo fueron ‘Justos entre las Naciones’, sino también héroes de la humanidad”.
A continuación, Ethy Oziel realizó una lectura dramatizada de las experiencias durante el Holocausto de sus abuelos Baruj Zabner y Rivka Faidengold, titulada “Soy lo presente de lo ausente”.
Por su parte Hannah Osers, tercera generación de sobrevivientes del Holocausto, leyó fragmentos del libro escrito por su abuela, Dorit Weiss de Osers, que le permitieron al público conectar con una historia de dolor, pero llena de esperanza y renacimiento.
Yves Bitton leyó el testimonio de la sobreviviente Lea Kertész, escrito por Hiram Gaviria, exdiputado de la Asamblea Nacional que fue precursor de estos actos de conmemoración en la Asamblea Nacional en el año 2014,
La mezzosoprano israelí de renombre internacional Hadar Halevi entonó a capella la pieza Eli Eli, escrita por la heroína de la Segunda Guerra Mundial Hannah Szenes y con música del compositor israelí David Zehavi.
La leaká Jai del cuerpo de rikudim (danzas folklóricas israelíes) del CSCDR Hebraica brindó dos piezas de danza, en las cuales contrastó la trágica historia del pueblo judío durante la Shoá con un mensaje de optimismo, esperanza y alegría para enfrentar las historias de este negro episodio de la humanidad, y un homenaje dancístico a Venezuela.
El Concejo Municipal otorgó reconocimientos especiales a la CAIV y a la Fraternidad Hebrea B’nai B’rith por su labor en la defensa de los Derechos humanos y el combate contra los crímenes de odio. También se hizo entrega de copia de la resolución de Concejo en la que se acordó llevar a cabo este acto a los representantes de las instituciones judías, al rector de la UCAB Arturo Peraza y a los directivos de las universidades Monte Ávila, Católica Andrés Bello y Metropolitana, y al orador de orden.
Redacción NMI con información del Comité Venezolano de Yad Vashem.
Fotos: NMI, Alcaldía de Chacao y Comité Venezolano de Yad Vashem.
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