E l cementerio judío Jésed Shel Emet de University City, parte del área metropolitana de Saint Louis, en el estado de Missouri, fue vandalizado el pasado fin de semana. El lunes 20 de febrero se descubrió que unas 170 lápidas habían sido derribadas en la necrópolis, que tiene un siglo de antigüedad.
Este hecho marca el peor acto antisemita de los últimos tiempos en Estados Unidos, donde casi 60 centros comunitarios judíos recibieron amenazas de bomba en el mes de enero, y otros 11 solo el mismo día lunes.
Todos estos avisos han resultado falsos hasta ahora, al igual que el recibido por la sede de la Liga Antidifamación en la ciudad de Nueva York el miércoles 22. El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, ordenó a la policía investigar y trabajar junto a las autoridades federales, y calificó estas amenazas como “una crisis nacional” debido a su frecuencia.
Por su parte, el vicepresidente Mike Pence visitó el 22 de febrero el cementerio Jésed Shel Emet y expresó, ante un grupo de familiares, voluntarios y reporteros, que “no hay espacio en Estados Unidos para el odio, la violencia, el antisemitismo ni otros actos de prejuicio”.
Algunas organizaciones judías consideran el vandalismo en el cementerio de Saint Louis y las amenazas de bomba como evidencia de que los grupos antisemitas se sienten alentados por la elección de Donald Trump, pues su campaña electoral atrajo el apoyo de grupos de extrema derecha y “supremacistas” blancos debido a su lenguaje discriminatorio contra los mexicanos y otras minorías que viven en EEUU. Sin embargo, el mandatario se ha distanciado reiteradamente de esos grupos.
En una nota contrastante, organizaciones musulmanas realizaron una colecta para ayudar a la reparación de las lápidas dañadas en el cementerio judío. Según Linda Sarsour, activista musulmana liberal, y Tarek el-Messidi, director fundador de la organización islámica Celebrate Mercy (“Celebremos la Piedad”), unas 3000 personas respondieron a su llamado por internet y recaudaron más de 91.000 dólares. “Los musulmanes estadounidenses manifestamos nuestra solidaridad con la comunidad judía al condenar esta horrible profanación”, escribieron los organizadores en el sitio web.
Con información de Reuters y Telemundo