La resolución encabezada por los palestinos fue aprobada por un amplio margen, exigiendo que el ejército israelí y los residentes judíos evacuen a la línea anterior a 1949 en el plazo de un año.
Mike Wagenheim*
La Ciudad Vieja de Jerusalén, además de Judea y Samaria, debe quedar Judenrein (“libres de judíos” en la terminología nazi) en el plazo de un año, según una resolución redactada por los palestinos que la Asamblea General de la ONU aprobó el miércoles.
La resolución, que fue aprobada por 124 votos a favor, 14 en contra y 43 abstenciones, tiene por objeto dar fuerza a una opinión consultiva de julio de la Corte Internacional de Justicia, que declaró ilegal la presencia israelí en cualquier área más allá de la línea de armisticio de 1949.
Danny Danon, embajador de Israel ante las Naciones Unidas, muestra a la Asamblea general una foto del túnel de Hamás donde se hallaron los restos de seis rehenes israelíes
(Foto: ONU)
Más de 40 países patrocinaron la resolución, que fue la primera que presentaron los palestinos, después de que se les concedieran privilegios sin precedentes para un no miembro de la ONU a principios de este año. La resolución pide a las Fuerzas de Defensa de Israel que se retiren completamente de Judea y Samaria, Jerusalén Oriental y la Franja de Gaza en un plazo de 12 meses, lo que significa evacuar todas las comunidades judías más allá de la línea de armisticio, incluida la Ciudad Vieja de Jerusalén.
También pide prohibir la venta a las FDI de cualquier equipo que se considere que pueda utilizarse en el territorio más allá de las líneas de 1949, y llama a boicotear todos los productos producidos por judíos en esas áreas.
El texto de la resolución no menciona ninguna preocupación de seguridad israelí, vínculos históricos de los judíos con esos territorios, ni los ataques terroristas de Hamás en Israel el 7 de octubre.
La votación se produjo después de un día de debate. Argentina, Chequia, Fiji, Hungría, Malawi, Micronesia, Nauru, Palau, Papúa Nueva Guinea, Paraguay, Tonga, Tuvalu y Estados Unidos se unieron a Israel en la oposición a la resolución. Cabe destacar que Alemania, el Reino Unido, Canadá, Italia, Ucrania y Australia estuvieron entre los que se abstuvieron.
El texto de la resolución no menciona ninguna preocupación de seguridad israelí, vínculos históricos de los judíos con esos territorios, ni los ataques terroristas de Hamás en Israel el 7 de octubre
Las resoluciones de la Asamblea General no tienen fuerza legal, pero se espera que la resolución se utilice en tribunales internacionales y otros foros para buscar medidas adicionales contra el Estado judío.
Se espera que los palestinos soliciten que el Consejo de Seguridad de la ONU aborde la cuestión. Las resoluciones del Consejo de Seguridad son vinculantes, pero se esperaría que Estados Unidos frustrara tal esfuerzo con su poder de veto.
Danny Danon, embajador de Israel ante las Naciones Unidas, calificó la resolución como una “decisión vergonzosa que respalda el terrorismo diplomático de la Autoridad Palestina”. Añadió que la Asamblea General “sigue bailando al son de la música de la Autoridad Palestina, que respalda a los asesinos de Hamás”.
Antes de la votación, el secretario general de la ONU, António Guterres, indicó a los periodistas que respaldaría la implementación de la resolución si se aprobaba.
Seth Riklin y Daniel Mariaschin, presidente y director ejecutivo, respectivamente, de B’nai B’rith Internacional, indicaron que la organización internacional sin fines de lucro está “horrorizada” por la “atroz” resolución. “B’nai B’rith Internacional condena enérgicamente la aprobación por parte de la Asamblea General de la ONU de la primera resolución patrocinada oficialmente por los palestinos, días después de que se convirtieran en el primer grupo de Estados no miembro que recibe muchos privilegios como Estado miembro en la Asamblea General, a pesar de las propias reglas y prácticas del organismo mundial”, señalaron. “La moción, que surge de una asamblea en la que los gobiernos árabes y otros gobiernos propalestinos tienen una mayoría automática para condenar anualmente a Israel más que a todos los demás países juntos, no tiene precedentes en su respaldo descaradamente unilateral a las reivindicaciones y demandas políticas palestinas, y erosiona aún más la credibilidad de la ONU como contribuyente serio a la promoción de la resolución de conflictos y los derechos humanos universales”.
“En última instancia, la paz solo prevalecerá cuando Hamás sea derrotado y los rehenes sean liberados, no mediante tediosas payasadas y pírricas ‘victorias’ palestinas en la ONU”
Arsen Ostrovsky y Nadav Steinman
“Es una vergüenza para todos los países que permitieron esta atroz afrenta a la justicia y la paz como parte de la última ‘sesión de emergencia’ de la Asamblea General sobre el Medio Oriente, que no hace nada para ayudar a abordar y resolver seriamente la emergencia”, finalizaron Riklin y Mariaschin.
La Conferencia de Presidentes de las Principales Organizaciones Judías Estadounidenses condenó enérgicamente la “sesgada y peligrosa” resolución, afirmaron Harriet Schleifer y William Daroff, presidenta y director ejecutivo respectivamente de esa organización. La calificaron como “la última salva en una campaña obsesiva de décadas contra Israel”. “Intentar aislar a Israel de esta manera es sin duda una amenaza a su seguridad nacional, ya que se enfrenta a amenazas terroristas por todos lados, y es ofensivo para su condición de única democracia en el Medio Oriente, por lo que no puede ser aceptado por la comunidad internacional”, añadieron.
Arsen Ostrovsky y Nadav Steinman, director ejecutivo y presidente de la junta directiva, respectivamente, del Foro Jurídico Internacional, afirmaron que “hoy, simplemente, las Naciones Unidas se han convertido en el brazo diplomático de Hamás”, y que la resolución “es tan solo la última de una letanía de resoluciones antiisraelíes obscenamente unilaterales en la ONU desde el 7 de octubre”. “Todo lo que hace es recompensar a los asesinos, violadores y secuestradores de Hamás, al tiempo que vierte más leña al fuego del antisemitismo mundial y erosiona la credibilidad que queda de la ya problemática y politizada Corte Internacional de Justicia, sobre la que se supone que se basa esta resolución”, añadieron. “En última instancia, la paz solo prevalecerá cuando Hamás sea derrotado y los rehenes sean liberados, no mediante tediosas payasadas y pírricas ‘victorias’ palestinas en la ONU”.
*Corresponsal principal en Estados Unidos de la cadena de televisión israelí i24NEWS. Cubre las Naciones Unidas y otros temas para JNS.
Fuente: Jewish News Syndicate (jns.org).
Traducción Sami Rozenbaum / Nuevo Mundo Israelita.
1 Comment
Srs,
La ciudad vieja de Jerusalén es de JUDIOS… es la capital del Estado De Israel !!!!