Los textos contienen partes de los libros de Zacarías y Nahum. También se encontraron objetos de la época de la revuelta de Bar-Kojba, el esqueleto de un niño momificado de seis milenios y una canasta de 10.500 años en perfecto estado
La Autoridad de Antigüedades de Israel anunció este martes el descubrimiento de fragmentos de manuscritos bíblicos de 2000 años de antigüedad en el Desierto de Judea, al sur del país, hallazgo calificado de histórico y uno de los más importantes desde el de los Rollos del Mar Muerto en 1947.
Fragmentos de manuscritos descubiertos en la cueva
Los fragmentos han permitido, según los investigadores israelíes, reconstruir pasajes de los libros de Zacarías y Nahum, que forman parte del libro de los doce profetas menores de la Biblia (Ketuvim). Fueron encontrados durante excavaciones realizadas en la llamada “Cueva del Horror”, ubicada sobre un acantilado de la reserva natural de Nahal Hever, en el marco de una campaña de lucha contra el saqueo del patrimonio.
Un arqueólogo desciende en rapel para poder llegar a la llamada “Cueva del Horror”, donde se realizaron los extraordinarios descubrimientos
Para llevar a cabo la operación, que se extendió a la parte del desierto de Judea situada en Cisjordania, la AAI proporcionó a los arqueólogos drones y equipo de montaña, incluidas cuerdas para descender en rapel.
Además de los fragmentos de pergamino, se desenterraron objetos que remontan a la revuelta judía de Bar Kojba contra los romanos (132-136 e.c.), como monedas, puntas de flechas y lanzas, telas tejidas, sandalias, e incluso peines para piojos. También se halló el esqueleto de niño momificado de 6000 años de antigüedad envuelto en tela, y una cesta de 10.500 años, probablemente la más antigua del mundo, según estima la AAI.
Monedas del período de la rebelión de Bar Kojba, en excelente estado de conservación
Según Israel Hasson, director de la AAI y quien mostró las piezas en su laboratorio del Museo de Israel en Jerusalén, la iniciativa lanzada en 2017 tiene como objetivo «salvar estas raras e importantes piezas patrimoniales de las garras de los ladrones». Desde el descubrimiento de los Rollos del Mar Muerto hace más de 70 años en las cuevas de Qumrán, las cavernas rocosas del desierto de Judea se han convertido en imanes para los saqueadores de antigüedades.
La Autoridad de Antigüedades de Israel estima que esta canasta tiene unos 10.500 años, lo que la convierte en la más antigua del mundo
Estos 900 fragmentos de manuscritos se consideran uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de todos los tiempos, porque incluyen textos religiosos en hebreo, arameo y griego, así como la versión más antigua conocida de partes del Antiguo Testamento.
Fuente: Ynet. Versión NMI.
Fotos: Autoridad de Antigüedades de Israel.